Diversos sindicatos con representación en el sector sanitario de Castilla-La Mancha han convocado este martes protestas ante los centros de salud de las provincias de Albacete, Ciudad Real, Cuenca y Guadalajara para denunciar la "situación desbordante" que viven los profesionales de Atención Primaria.
En Albacete, la concentración ha tenido lugar en la puerta del Centro de Salud Zona VII, convocada por los sindicatos CCOO, UGT, CSIF, SAE y USICAM.
Cerca de un centenar de personas, entre ellos profesionales sanitarios que trabajan en este centro, han salido a la calle para denunciar "la falta de personal".
Lucía García, representante de CCOO y como portavoz de los convocantes, ha indicado que "es necesario reforzar las plantillas porque Atención Primaria está saturada" y ha advertido: "Los profesionales no podemos más".
En Cuenca, los sindicatos CCOO, CSIF, SAE y UGT se han sumado a las concentraciones ante el Centro de Salud de San Fernando, en la capital, donde han denunciado la situación "caótica" de la Atención Primaria y han exigido que se mejoren sus condiciones, y en especial la dotación de personal.
Los sindicatos han reconocido que la pandemia ha puesto de manifiesto todas las carencias de la atención primaria, y que la situación actual "nos pilla ya agotados", por lo que demandan aspectos como que se cubran las sustituciones.
Además de la concentración de este martes, el próximo día 20 han llamado a la movilización ante los hospitales y los convocantes han confiado que sea secundada por los profesionales sanitarios.
La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) ha explicado, en un comunicado, que la concentración de este martes ha tenido como finalidad exponer los problemas que afectan al sistema sanitario de Castilla-La Mancha, "gravemente dañado a causa de la falta de recursos materiales y humanos", así como a la improvisación que a su entender ha caracterizado la gestión de la crisis sanitaria del coronavirus.
La presidenta del Sector de Sanidad del CSIF en Castilla-La Mancha, Sacramento Rodríguez, ha considerado que la pandemia ha visualizado la importante labor de los profesionales del ámbito sanitario, pero al mismo tiempo también “ha mostrado todas las carencias, todas las improvisaciones, todas las necesidades que se llevan arrastrando durante muchos años y que la han dejado en una situación desbordante”.
Rodríguez ha indicado que en abril ya se habían notificado 3.000 contagios de COVID-19 en profesionales sanitarios y ha añadido que, desde el 11 de mayo, se suman otros 1.480, unos datos que a su modo de ver ponen de manifiesto “la terrible exposición al coronavirus” de una plantilla que sufre la falta de recursos y la incomprensión por parte de la ciudadanía, de sus servicios y programas, "lo que se en muchos casos se está traduciendo en forma de agresiones".
Entre las medidas urgentes, Rodríguez ha citado una reforma necesaria de la Atención Primaria adaptada a la situación epidemiológica actual o sucesivas y la adecuación de las plantillas a la situación real; la evaluación de los riesgos psicosociales; la creación de bolsas específicas de las distintas categorías sanitarias para garantizar la cobertura de trabajadores y la sustitución de todos los profesionales que se encuentren en incapacidad temporal, vacaciones, asuntos propios o días solicitados para formación continuada, así como "un verdadero refuerzo de profesionales" para afrontar la pandemia.
"Son muchos los problemas de la Atención Primaria en la región, una lista muy larga", ha opinado Rodríguez, que ha incidido en que todo pasa "por una inversión real", para "salvar al sistema del colapso en el que se encuentra".