Castilla-La Mancha tiene 75 residencias de mayores afectadas por covid-19 y 438 residentes positivos, de los cuales el 50 por ciento de las residencias y el 75 por ciento de los residentes afectados pertenecen a la provincia de Toledo, según los últimos datos publicados por la Consejería de Sanidad.
Así lo ha explicado este lunes, a preguntas de los medios de comunicación en una rueda de prensa, la consejera de Bienestar Social, Aurelia Sánchez, quien ha asegurado que se está produciendo un "descenso" tanto en el número de residencias afectadas, como en el número de residentes con casos positivos.
En este sentido, la consejera ha añadido que esta "segunda ola" está siendo muy distinta a la primera, porque la mayoría de residencias afectadas son las que tuvieron "ninguna o muy baja afectación durante la primera ola", por lo que los residentes y los trabajadores no están inmunizados.
Ha apuntado que la mayoría de los positivos "se van negativizando rápidamente", y están disminuyendo los ingresos en los hospitales y los fallecimientos.
Además, Sánchez ha manifestado que esperan que "muy pronto" se puedan retomar y normalizar las visitas a las residencias de mayores, porque aunque la comunicación entre familiares y residentes es "continua" ha indicado que entienden que necesiten verse y "estamos trabajando para que lo antes posible así sea".