Castilla-La Mancha registró ocho muertes por ahogamiento no intencionado en espacios acuáticos en 2020, una muerte menos que las nueve que se produjeron en la región en 2019, siguiendo la tendencia general de descenso de fallecimientos con respecto al año anterior del conjunto de España.

En España las muertes por ahogamiento no intencionado en espacios acuáticos españoles, disminuyeron un 23,18 por ciento en 2020 con respecto al año anterior, al registrarse un total de 338 personas fallecidas, 102 menos que en 2019.

El Informe Nacional de Ahogamientos (INA), elaborado por la Real Federación Española de Salvamento y Socorrismo, atribuye esta reducción a las circunstancias especiales generadas por la pandemia.

Los meses en los que más ha bajado el número de víctimas mortales han sido octubre, con 37 fallecidos menos; septiembre, con 24; y julio, con 18.

Agosto fue el mes con más muertes por ahogamiento, incluso más que el año anterior (81 frente a 74), y también se registraron leves aumentos en enero (21 frente a 17) y noviembre (17 frente a 14).

Todos los territorios españoles han registrado menos muertes excepto el País Vasco (de 12 a 17), la Comunidad de Madrid (de 4 a 5) y Ceuta, donde hubo un fallecido en el agua. En Navarra y la Comunidad Valenciana las cifras se han mantenido con respecto al año anterior.

La Comunidad Valenciana se ha situado en cabeza por segundo año consecutivo como la autonomía con más personas fallecidas en espacios acuáticos, con un total de 61.

En cuanto al perfil de la persona ahogada en España, el INA ha señalado que son hombres, de nacionalidad española, con más de 35 años, que perdieron la vida en la playa o en espacios sin vigilancia y entre las 10:00 y las 22:00 horas.