Castilla-La Mancha, territorio vetado para los visitadores médicos: prohibido pasar
La Asociación de Visitadores Médicos de Ciudad Real ha acusado este martes al Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (Sescam) de poner en riesgo el trabajo de los más de 600 profesionales que desarrollan este trabajo en la región, al impedirles actualmente trabajar en hospitales y centros de salud.
El presidente de la Asociación de Visitadores Médicos de Ciudad Real, Jesús Ballesteros, ha declarado a Efe que el Sescam impide a estos profesionales, en base a un protocolo de seguridad muy difícil de cumplir, acudir a los centros sanitarios para entrevistarse con los profesionales médicos, como lo hacían antes de la emergencia sanitaria.
Ballesteros ha comentado que esta situación ha sido asumida por los profesionales durante los momentos de mayor incidencia de la pandemia, pero que, una vez que los datos de contagios han mejorado y, sobre todo, que todos los profesionales sanitarios han sido vacunados, reclaman que "se relajen las medidas recogidas en este protocolo" para que puedan seguir acudiendo a visitar a los médicos a los centros de salud y hospitales de la región.
Y ha agregado que así se lo han hecho saber a la gerente del Sescam, Regina Leal, "quien no ha tenido en cuenta" esta petición, ha aseverado.
Otros trabajadores sí pueden pasar
Los visitadores médicos han comentado que no entienden la posición que mantiene el Sescam para seguir impidiéndoles el acceder a los centros sanitarios, mientras que, por el contrario, "sí permite que pueden entrar a hospitales y centros de salud los reponedores de máquinas expendedoras o los vendedores de la ONCE".
Y ha advertido de que, en otras comunidades autónomas como Madrid o Andalucía, permiten ya que los visitadores médicos puedan trabajar con los profesionales sanitarios que han sido vacunados.
En este sentido, han reclamado del Sescam "una mayor sensibilidad" hacia este colectivo de trabajadores, que ven peligrar su puesto de trabajo, por el hecho de que muchas industrias farmacéuticas han comenzado a prescindir de los trabajadores que se encontraban en ERTEs.
Para esta asociación, el actual protocolo de seguridad debería rebajar las medidas que contempla, teniendo en cuenta la incidencia de la pandemia y el hecho de que los médicos ya han sido vacunados en la región.
Además, han explicado que los visitadores médicos están dispuestos a utilizar mascarillas, guantes y geles cuando interactúen con los médicos e, incluso, usar trajes de protección en lugares previamente reservados para estos encuentros y utilizando tablet para evitar la entrega directa de documentos, y evitar tener que entrevistarse con los médicos a las puertas de los centros de salud o en la cafetería de cualquier establecimiento hostelero, como están haciendo ahora.
En este punto, Ballesteros ha pedido una mayor "complicidad" de la Gerencia del Sescam para poner fin a la situación actual y así evitar que estos profesionales acaben perdiendo su puesto de trabajo.