Las personas que acudan a los parques arqueológicos y yacimientos visitables de Castilla-La Mancha podrán viajar en el tiempo a través de experiencias inmersivas de 360 gracias a la realidad virtual mediante un proyecto de digitalización que el Ejecutivo autonómico espera tener disponible este año.
Con este fin, el Consejo de Gobierno de Castilla-La Mancha ha autorizado un gasto de 1,9 millones de euros, a través de la Fundación Impulsa, para la digitalización de estos espacios, concretamente de los cinco parques arqueológicos de la región --Recópolis, Segóbriga, El Tolmo de Minateda, Alarcos y Carranque-- y más adelante los yacimientos de Libisosa, el Cerro de las Cabezas y Noheda.
La portavoz del Ejecutivo regional, Blanca Fernández, ha dado cuenta en rueda de prensa este miércoles de este acuerdo, que permitirá generar "experiencias sorprendentes" y "una experiencia única sin precedentes" para todos los que visiten estos espacios, utilizando estas herramientas como elemento didáctico, de promoción y como "marca innovadora" que redundará en un aumento del nivel de visitas.
La realidad virtual permitirá a los visitantes disfrutar de una experiencia "más completa" de los parques y yacimientos como si estuvieran en una maqueta 3D, con la que interactuar, y para ello se utilizarán gafas de realidad virtual de la marca Oculus Quest 2, la "más sofisticada" en este ámbito hay actualmente, ha destacado.
Además, se creará una aplicación móvil para que los visitantes con sus móviles puedan ver en una ventana cómo era el parque en su momento histórico, como si se encontraran en él, y "qué era lo que había" cuando estaba "en su esplendor", completando todo ello con música, sonido e imágenes concretas.
Blanca Fernández ha recordado que los parques arqueológicos de la región están abiertos desde el pasado 4 de marzo y que hasta el próximo 31 de mayo serán gratis, con cita previa --a través de la https://cultura.castillalamancha.es/dentro del apartado de Patrimonio Cultural--y guiada.
Frente a las 41.766 personas que los visitaron en 2019, el pasado ejercicio fueron la mitad --unas 24.000-- las que disfrutaron de estos espacios debido a la pandemia, que también obligó a tener cerrados los parques, a lo que se suman las limitaciones de movilidad todavía existentes entres comunidades autónomas, lo que hace valorar el dato "en un año tan malo para el turismo" y hace que merezca la pena "la inversión y modernización".