A primera hora de esta tarde ha comenzado la vacunación de los más de 37.700 profesionales que trabajan en los centros educativos de Castilla-La Mancha, que se hará en turnos de mañana y tarde, en las seis capitales y Talavera de la Reina y en un proceso "muy ágil" con la intención de acabar antes de los días festivos de Semana Santa.
Las primeras profesionales en la fila para vacunarse en Toledo, en la zona de urgencias del nuevo hospital, han sido cuatro mujeres que trabajan en Centros de Educación Especial de la provincia: Sagrario Caro lo hace en el Ciudad de Toledo; Carmen Marchante y Silvia Manjavacas en el Santísimo Cristo de la Salud de Quintanar de la Orden, y Mercedes Benito en el Mingoliva de Madridejos.
Estas mujeres han explicado a Efe que tenían ganas de vacunarse porque trabajan con población vulnerable y porque "lo hemos pasado mal" durante algunos meses de esta pandemia, y también han afirmado que "es más seguro estar vacunadas". Antes de acudir, todas ellas han tomado un paracetamol para reducir posibles efectos de la dosis.
La vacunación iniciada este jueves se lleva a cabo en el ferial de Talavera de la Reina, en la Gerencia de Ciudad Real, en la Hípica de Cuenca y en pabellones multiusos de Guadalajara y Albacete, además de la zona de urgencias del nuevo hospital de Toledo.
Amador Pastor ha explicado a los periodistas que este proceso de vacunación es "complejo" porque el número de profesionales que pertenecen a los centros de educación especial, infantil, primaria y secundaria supera los 37.700, y ha indicado que cada persona ha sido citado en la provincia en la que desempeña su trabajo.
Ha felicitado a los centros educativos por el "trabajo ímprobo" de facilitar y cribar los datos de cada profesional y ha hecho hincapié en que su objetivo ha sido "tener una atención directa con cada persona y conocer sus circunstancias", es decir, "tratar los datos no como números, sino con la calidad humana de cada profesional".
Pastor ha rechazado las críticas que ha recibido la Junta por la improvisación en la vacunación a este personal educativo y ha asegurado que "ante las críticas quiero anteponer el gesto que se tiene con la comunidad docente de ser vacunado como colectivo profesional esencial y, evidentemente, en un tiempo récord".
En este sentido, Íñigo Cortázar ha agregado que "chocan las quejas por hacerlo rápido cuando, precisamente, la gente lo que nos pide es hacerlo lo antes posible" ya que el objetivo es "vacunar lo antes posible" de cara a la labor educativa que desempeñan.
Ha manifestado que un equipo multidisciplinar está llevando a cabo esta vacunación, que se ha organizado con la premisa de "no entorpecer" ni la labor asistencial ni la dispensación de la vacuna.
También ha dicho que no están encontrando "significativas muestras de rechazo" a la vacuna, pese a que "evidentemente" la paralización de AstraZéneca la semana pasada "pudo generar cierta confusión", y al respecto ha dicho que se hizo por prudencia y cautela ya que "en ningún caso" se ha demostrado causalidad entre hechos adversos y la vacuna.
Cortázar ha recordado que tanto la OMS como las agencias europea y española del medicamento han certificado esta vacuna, y ha dejado claro que la primera dosis, se haya pasado o no la enfermedad, es "muy recomendable" ya que se avanza en la inmunización.
Según el viceconsejero de Educación, la gran mayoría del personal de los centros educativos ha optado por la vacunación: "no ha habido grandes rechazos significativos", ha apuntado.