El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha participado este martes como ponente en el foro "Wake Up, Spain!" organizado en Madrid por el periódico El Español. Allí ha realizadouna "lectura en movimiento, muy esperanzadora" sobre la situación económica de la región y global, pues ha indicado que se vive un ambiente de "posibilidad de optimismo, esperanza fundamentada" gracias a la llegada de las vacunas y también a los fondos "Next Generation" de la Unión Europea (UE).

Sobre el dinero comunitario, ha subrayado que los 140.000 millones de euros movilizados por la UE son "más que la primera generación de fondos europeos" que llegó a España y que supuso una transformación del país "por completo". Sin embargo, ha abogado por que en esta ocasión "ese dinero no sirva para poner baches ni para volver a como se estaba antes de la pandemia", sino que ha animado a que se aprovechen "para dar un salto".

En este sentido, ha señalado que "una de las grandes bazas que tiene España" es el sol y, por lo tanto, su capacidad para producir energía eólica. Así, ha apuntado el horizonte de que dentro de diez años el país pueda ser soberano desde el punto de vista energético gracias a las energías renovables, un aspecto en el que Castilla-La Mancha ofrece posibilidades.

"Hasta ahora, en España el sol solo se ha aprovechado como factor turístico", ha señalado García-Page que, en este punto, también ha mostrado su confianza en que el turismo se recuperará "mejor de lo que pensamos", con la posibilidad de llegar a 120 millones de turistas al año en España.

Castilla-La Mancha tiene 450 proyectos preparados

García-Page ha señalado que Castilla-La Mancha ya ha tiene preparados 450 proyectos de grandes y medianas empresas para que opten a dichos fondos europeos y ha defendido que este dinero llegue a empresas de todo tipo, porque "las grandes empresas tiran de todas, y en España hay un reparto global en todos los sectores".

De este modo, ha rechazado que se establezca la dicotomía "grandes empresas-pequeñas empresas", del mismo modo que tampoco se ha mostrado a favor de la docotomía "economía-virus", pues ha reflexionado con son "siameses, están pegados por el abdomen" y solo pueden salir adelante ambos a la vez.

Blindar por ley el acceso a las telecomunicaciones

Durante su intervención, García-Page también ha avanzado su intención de recoger vía legislativa el blindaje de un nuevo derecho ciudadano como es el del acceso a las telecomunicaciones, un aspecto que su Gobierno ha decidido "no por una razón económica, sino de servicio público".

Así, ha apuntado que la evolución de las nuevas tecnologías propiciará que un ciudadano no tenga que moverse de casa para pedir una cita médica, o incluso "podrá ver por televisión la radiografía que le están haciendo a 200 kilómetros".

Por ello, vaticina un escenario en el que acabará siendo "evidente" que el éxito de la buena prestación de los servicios públicos "tendrá que ver con la tecnología", razón por la que blindar ese derecho de acceso a las telecomunicaciones es tan importante.

Eso sí, será un extremo para el que aboga la participación del sector público, pero siempre desde una "estrategia nacional de telecomunicaciones".