La portavoz del Gobierno de Castilla-La Mancha, Blanca Fernández, ha señalado que las autoridades sanitarias de la región se decantan por aplicar a los ya vacunados en primera instancia con AstraZeneca una segunda dosis de la farmacéutica Pfizer, si bien ha dejado claro que serán los interesados los que tendrán la última palabra y podrán acogerse a continuar la pauta con la primera opción.
A preguntas de los medios tras una rueda de prensa, Fernández ha indicado que este extremo será posible siempre y cuando firmen un consentimiento, si bien ha pedido "no enredarse en polémicas", ya que en estos momentos da por despejadas las "serias dudas" sobre los efectos secundarios de AstraZeneca.
"Hoy no tenemos esas dudas, estamos más tranquilos y tenemos dos opciones, y eso son dos buenas noticias. La gente puede decidir", ha afirmado.
En total, ha precisado, ya se han inoculado 1,2 millones de dosis a los castellanomanchegos, y el cálculo pasa por elevar esa cifra a 1,7 millones a finales del mes de junio, "un magnífico dato".
Además, asegura que la capacidad asistencial de la región podría vacunar el doble de rápido si el stock de vacunas fuera mayor, pero "en cualquier caso se ha cumplido el objetivo de poner al menos 15.000 vacunas al día".
Los inmunizados por completo en los últimos 7 días se han elevado a 52.000, lo que hace que el total de vacunados con dos tomas se eleven hasta casi 380.000 en toda la región, "más del 22 % de la población".
Vacunación de temporeros
Sobre la opción plantear una estrategia de vacunación específica para trabajadores temporeros del sector agrícola en la región, ha apostado por abordar ese debate a nivel nacional, si bien Castilla-La Mancha es más partidaria de mantener su hoja de ruta vacunado por grupos de edad.
"Es un debate que se tiene que producir en el seno de la ponencia de vacunación, porque cada realidad es distinta. Pero no podemos hacer la guerra por nuestra cuenta y hay que tomar decisiones de manera equilibrada, conjunta y científica", ha abundado.
Por último, preguntada sobre la opción de establecer un sistema de cita previa a petición propia, ha rechazado este extremo, ya que la estrategia en la región "ya funciona muy bien y el ritmo es bueno".