PREGUNTA.- Oiga ¿cuánto se ha desgastado a lo largo de la pandemia y la crisis económica?
RESPUESTA.- En lo personal he sufrido muchísimo, y todavía sigo con contusiones. Yo no puedo dejar los problemas en la percha y llevo desde que comenzó la crisis del Covid acostándome a las 4 de la mañana en permanente conversación con el consejero de Sanidad, y obsesionado con las cifras. No me quejo, porque es mi trabajo y mi vocación, pero me he resentido personalmente.
P.- ¿Sólo personalmente o también políticamente?
R.- Creo que también me he resentido en apoyo popular, sobre todo al principio de la pandemia, como nos ha ocurrido a todos los que estábamos gobernando, pero finalmente las cosas están volviendo a su cauce. Una pandemia de este tipo con tantos muertos no sólo no te puede dar votos, sino que es casi obsceno pedirlos.
P.- Permítame una pregunta personal, ¿usted ha sufrido una “guerra sucia” de su propio partido aprovechando su separación matrimonial y otros asuntos personales?
R.- Sinceramente no lo creo. Es muy difícil, porque para remover la basura tiene que haber basura, y yo soy de los que tiran la basura todos los días. Yo reciclo, y no permito que haya basura a mi alrededor.
P.- Pero que no permita que haya basura no significa que algunos no hayan intentado mancharle con ella…
R.- Tal vez, pero yo, de la gente de mi entorno y de mi confianza, no lo he sentido. Otra cosa es la oposición, que efectivamente ha intentado mancharme con toda seguridad, porque ese es su modus operandi. Fíjese, he tenido directores generales ubicados justo al lado de donde tengo el despacho que hoy están en los tribunales por fabricar mensajes y dossiers falsos. Eso es guerra sucia y vivir en el lodazal.
P.- Vamos, que no fue nadie de su partido quién difundió ese vídeo donde se afirmaba que usted estaba borracho en una comparecencia pública durante el estado de alarma…
R.- No lo sé, no creo que en mi partido pueda haber alguien que vaya con esa intención tan rastrera y miserable. Ese día yo estaba bajo los efectos de una medicación porque tenía una lesión en la espalda, y me estaba medicando. Yo bebo tanto vino como cerveza de manera extraordinaria porque son cosas que se fabrican en Castilla-La Mancha, nada más.
P.- ¿Y mantiene el objetivo de tener vacunada en septiembre a toda la población de Castilla-La Macha? porque nos situaríamos a la cabeza de España y casi de la UE…
R.- Sí, me comprometo a que, a finales de septiembre, principios de octubre toda Castilla-La Mancha esté vacunada. Vamos muy bien, y tenemos un sistema sanitario que va muy bien por aire, con los hospitales, y por tierra con la infantería, gracias a la atención primaria. Esta atención primaria es extraordinaria, trabajan muy bien el terreno en una región que lo necesita. Fíjese, iríamos muy bien en agua si tuviéramos agua, pero bueno, eso también se va a arreglar.
P.- Pues me ha servido en bandeja que le pregunte si usted va a vivir el final del trasvase Tajo-Segura, porque el Gobierno no se lo está poniendo fácil…
R.- Estoy seguro de que mi generación va a vivir el final del trasvase Tajo-Segura. A mí me da igual qué partido esté gobernando en Moncloa, tengo el deber moral de cumplir el programa por el que se me ha votado. Aquí no hay una guerra del agua sino de intereses y hay que buscar soluciones. Los trasvases no son la solución de futuro. Plantearse un trasvase del Ebro sería políticamente inviable, no sé por qué tenemos que aceptar el del Tajo.
De la misma entrevista de Esther Esteban a Emiliano García-Page: