El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha anunciado este viernes que el Ejecutivo autonómico va a pedir en el Consejo Interterritorial de Salud que se acelere la vacunación contra la covid-19 de los niños de 6 a 12 años.
“Se han portado de maravilla, han sido de los más disciplinados, los padres van a estar más tranquilos y, realmente, los riesgos son insignificantes por no decir inexistentes en comparación con las ventajas de reducción en la capacidad de trasmisión que supone la vacuna”, ha argumentado este viernes durante la inauguración del segundo Centro de Salud de Azuqueca de Henares (Guadalajara).
El presidente castellano-manchego ha afirmado que la comunidad autónoma está preparada para administrar esas vacunas, en el momento en que se autorice para esa franja de edad.
“Máxima normalidad”
En relación a las posibles nuevas restricciones ante el aumento de la incidencia y las medidas tomadas en otras comunidades, García-Page ha señalado que el Gobierno regional va a "trabajar para que haya un escenario de máxima normalidad tanto en la vida social como económica”. Ha insistido en que “las medidas que se tomen deben ser coherentes y proporcionadas, pero no pueden ser las mismas que cuando no había vacuna ni radicales”.
En este sentido, el presidente regional ha afirmado que Castilla-La Mancha, en el Comité Interterritorial de Salud, va a defender la serenidad e incidirá en la necesidad de seguir trabajando para que todo el mundo se vacune, porque se ha demostrado que en más del 90% salva vidas y además reduce el contagio.
“No nos podemos permitir la situación de que esto no tiene perspectiva. No es buen ni psicológicamente, ni socialmente, ni laboral ni económicamente”, ha señalado.
Fondo covid
En esta línea, ha defendido la necesidad de que el Gobierno central autorice para 2022, en los Presupuestos Generales del Estado un fondo covid para las comunidades autónomas, como lo hubo en 2021, pero que no se contempla para el próximo año.
"Si sigue habiendo covid debe seguir habiendo financiación. El problema no es el dinero para las vacunas, sino que poner las vacunas vale mucho más que las vacunas”, ha señalado en referencia a los profesionales y medios necesarios para continuar con la vacunación, vigilancia y control del virus.