La delegada de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) en Castilla-La Mancha, Paloma Castro, ha pronosticado un invierno 2022 con un perfil cálido, sobre todo al noroeste de la región, y un aumento de las precipitaciones, que será algo más húmedo cuanto más al este, además de mantenerse las heladas y nieve en la zonas más altas de la región.
En rueda de prensa este viernes en Toledo, donde también ha ofrecido los datos del otoño a punto de concluir, Castro ha incidido en que a partir de este próximo día 21, que entra el invierno -a las 16:59 horas-, se van a mantener las heladas, en especial en las parameras de Cuenca y en la serranía de Guadalajara, en lo que resta de diciembre.
En la previsión para enero, febrero y marzo, la responsable regional de la Aemet ha observado "una anomalía cálida y seca" y ha hablado de "una clara señal" de aumento de la probabilidad "de un tercil cálido más al noroeste", donde las lluvias no serán muy abundantes, y tiempo más húmedo "cuanto más al este".
"No será un invierno distinto"
Ha confirmado que "no será un invierno distinto" al de los años precedentes y ha avanzado, igualmente, la llegada de algunas nevadas, pero no de excesivas precipitaciones que, sumado a un otoño poco lluvioso, ha supuesto que únicamente la Cuenca del Júcar presente un balance positivo, que no concurre en la del Tajo y menos aún en la del Guadiana.
Precisamente, hasta el pasado día 14, el agua embalsada en la comunidad ha ascendido al 35,95 %, con 2.084 hectómetros cúbicos, cuando la media nacional se ha fijado en el 41,8 %, con un significativo 52 % en la provincia de Cuenca y un 46 % en la de Toledo, pero sólo un 26 % en la de Ciudad Real y un 30 % en la de Guadalajara.
Algo que ha venido dado por un otoño "normal", con una décima de subida sobre el del 2020 (14,5º), y una subida media de dos grados en el periodo de la serie 1981-2010, con una anomalía de dos décimas en las máximas y una décima en las mínimas, salvo en la provincia de Ciudad Real donde la media ha subido tres décimas.
"La normalidad absoluta se ha producido en la provincia de Guadalajara, con una temperatura media de 11,9º", ha concretado Castro, quien ha ampliado que septiembre ha sido cálido -20,2º- y ha destacado la máxima de 38,8º en Villarrobledo (Albacete) el día 7 y la mínima de 3,4º en Molina de Aragón (Guadalajara) el día 21.
Octubre ha repetido los parámetros del mes anterior, "cálido", con una temperatura media de 15,6º, con la máxima en Almadén (Ciudad Real), con 31,5º el día 8, y la mínima otra vez en Molina de Aragón, con -4,2º el 24, y en noviembre ha habido "un cambio radical", ha proseguido Castro, "con todos los niveles fríos" y una media de 7,6º, sobresaliendo los -6,2º en Molina de Aragón, "el congelador de España".
Efeméride de este otoño
La efeméride de este otoño, ha relatado Castro, ha sido la máxima registrada en Cuenca (20,3º) este pasado día 14, que "nunca había pasado antes".
Respecto a las precipitaciones en la región, las ha cifrado en 172 milimetros (mm), por debajo de lo normal, y zonas más húmedas en La Mancha toledana y conquense, y sequía más pronunciada en las provincias de Ciudad Real y Albacete.
Los porcentajes máximos de lluvia se han dado en Cuenca, sobre todo en la Serranía, y algunos puntos también de la zona sur de la Alcarria, así como en zonas de Toledo o las sierras de Alcaraz y Segura, en Albacete, si bien la media ha sido de 100-125 mm.
Sobre la reserva hídrica otañal, el Tajo ha cerrado con 44 ,4 % de embalsado, el Júcar con un 52,7, "una muy buena noticia y, sin embargo, la mala ha sido el Guadiana con sólo un 29,9º de agua embalsada respecto a la normal", ha apostillado.
De tal forma, ha resumido, "los meses de septiembre y octubre han sido húmedos, más en Toledo, y normal en las otras cuatro provincias", aunque con tormentas, algunas torrenciales, y "noviembre ha sido seco", con 28 mm de media.
Ve "muy improbable" otra Filomena
Para concluir, Paloma Castro ha advertido de las nieblas que agravan la contaminación atmosférica, que ha afectado sobre todo a Puertollano (Ciudad Real), la zona norte de la provincia de Toledo, la Sagra, y el pasillo de Alovera (Guadalajara), en estos dos casos por proximidad con la Comunidad de Madrid
A preguntas de los medios de comunicación, sobre la posibilidad de volver a padecer una 'Filomena', Castro ha atajado que "es muy improbable", que ha cifrado en un 1 %, "como encontrar una aguja en un pajar", ha comparado.