Castilla-La Mancha tiene como objetivo conseguir un sistema sanitario "moderno e innovador, eficiente, seguro, equitativo, sostenible, centrado en las personas y orientado a los resultados y capaz de responder adecuadamente a las expectativas de salud de la sociedad", ha afirmado el consejero de Sanidad, Jesús Fernández Sanz, durante la mesa coloquio 'El Futuro de la Gestión Sanitaria', celebrado en el XIV Congreso de Gestión de Proyectos, donde ha participado junto al consejero de Sanidad de Castilla y León, Alejandro Vázquez.
"La formación debe ser una herramienta estratégica para ello, donde hacerlo con emoción es clave", ha explicado Fernández Sanz, afirmando que "así, se presentan como fundamentales las expectativas de liderazgo y motivación en el entorno directivo, todo ello con creatividad e innovación y apostando por la retención del talento", ha subrayado.
El responsable de Sanidad castellano-manchego ha indicado que actualmente vivimos en una sociedad caracterizada por el envejecimiento de la población, que acarrea más enfermedades crónicas. Todo eso, unido a que vivimos en la era de la comunicación, permanentemente conectados a internet a través de dispositivos móviles, "hace que los usuarios tengan nuevas y numerosas expectativas con los nuevos profesionalismos, todo ello en unas circunstancias de presupuestos ajustados, y con una gran necesidad de innovación tecnológica".
Cambio de modelo
"El modelo actual debe cambiar, ya que los resultados en sanidad no mejoran por hacer más, pedir más y gastar más", ha asegurado el consejero de sanidad resaltando que cada vez más, la ciudadanía solicita más información y que ésta sea más clara, con un e-paciente con grandes perspectivas en el Big-data, la inteligencia artificial y la Medicina de Precisión, es decir, "que cree en una innovación permanente".
"Ahora se procura una sanidad pública con accesibilidad universal, con una financiación adecuada, que lucha por un sistema sostenible, donde la ciudadanía reclama transparencia y participación en el sistema, pero más que centrarnos en curar la enfermedad, el cambio de modelo pasa por prevenir la enfermedad, añadir años de vida saludables a la esperanza de vida y apostar por los cuidados", ha afirmado el responsable de las políticas sanitarias en Castilla-La Mancha.
"Nuestra Comunidad, dentro de su Plan de Salud, recoge la priorización de objetivos y marca las acciones para ordenar la toma de decisiones, contando como áreas de interés la educación en salud, la humanización en la asistencia sanitaria, la orientación a la salud comunitaria con refuerzo a la Atención primaria y optimizando los recursos", ha explicado Fernández Sanz, resaltando que "todo ello sería imposible sin contar con los liderazgos tanto de los equipos directivos de las organizaciones, como de los liderazgos de los profesionales".