El nuevo Plan Hidrológico del Tajo incluye unos caudales ecológicos mínimos que son "insuficientes" para alcanzar el buen estado ambiental del río, según el estudio realizado por el equipo científico y técnico de la Cátedra del Tajo UCLM-Soliss que ve necesario fijar unos caudales "basados en estudios de ecosistemas" para garantizar la protección del hábitat y preservar las áreas protegidas.
El documento de la Cátedra del Tajo, difundido este miércoles, destaca que en Aranjuez "no está justificado ni técnica ni legalmente" que se "retrase" hasta 2027 el establecimiento completo del caudal mínimo ya que se ha marcado conseguir objetivos en tres fases.
"Dado que hoy en día el Tajo a su paso por Aranjuez se encuentra en mal estado, retrasar la ligera mejoría con esta temporalización perjudica a todo el ecosistema fluvial. Y ha sido establecida a pesar de que la zona incluye áreas protegidas como Lugares de Importancia Comunitaria (LIC) y Zonas de Especial Protección para las Aves (ZEPA), que también existen aguas arriba y abajo", ha señalado el documento.
En el caso de Toledo y Talavera de la Reina, los nuevos caudales ecológicos mínimos "no supondrán ninguna mejora en el estado del río" ya que los caudales reales han estado ya los últimos años por encima de los valores que ahora se han fijado y además "carece de sentido" fijar caudales mínimos de idéntica magnitud en Talavera y en Toledo atendiendo a la secuencia lógica del río, que recibe mayores aportaciones aguas abajo, por acumulación.
El equipo académico de la Cátedra del Tajo considera necesaria "una mayor ambición para poder cumplir con la obligatoriedad de conservar" las zonas protegidas manteniendo el cien por cien del hábitat ya que "bajar de ese porcentaje supondría un deterioro del hábitat".
En conclusión, el estudio de los investigadores subraya que para que el río Tajo pueda alcanzar su buen estado ambiental es "esencial" contar con caudales ecológicos mínimos que garanticen el mantenimiento de las comunidades vegetales y de fauna, y deja claro que los métodos empleados para establecer esos caudales ecológicos deben ser "los que mejor se adapten para conseguir dichos fines, dejando de lado otros intereses ajenos a los objetivos ambientales del río".