La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) ha denunciado la situación de "maltrato laboral" que padecen los docentes que forman parte de los tribunales de oposición de Educación Infantil, con jornadas de corrección de exámenes que superan las 12 horas y que incluso "ponen en riesgo la adecuada calificación de las pruebas".
El pasado sábado, 18 de junio, arrancaba el proceso selectivo de Maestros en Castilla-La Mancha y el de Educación Infantil se celebró en Toledo, donde realizaron la prueba un total de 3.032 aspirantes, la más multitudinaria de las ocho especialidades, según ha informado CSIF en nota de prensa.
De igual modo, ha señalado que el lunes, 20 de junio, comenzaban unas correcciones que deben estar concluidas el próximo jueves y en el que participan 38 tribunales compuestos por un total de 190 profesores. Según el sistema, uno de los cinco miembros de cada tribunal lee el ejercicio y el resto hace anotaciones. Al final se hace una puesta en común proporcionando una puntuación final dentro de un proceso lento que debe garantizar la correcta comprobación del examen. Cada tribunal se encarga de una media de 80 ejercicios.
Ratios y días de corrección
El responsable de CSIF Educación Toledo, Enrique de la Rosa, ha señalado que "la Consejería debería haber ampliado el número de tribunales de oposiciones bajando las ratios o el número de días de corrección, pero todo se ha llevado a cabo bajo criterios económicos, lo que está provocando que los docentes encargados se hayan visto completamente desbordados, con la presión añadida de llegar a tiempo a la fecha límite, que estaba prevista para el miércoles pero que finalmente será el jueves, y ello a costa de la fase oral, en la que se perderá un día".
Además, De la Rosa ha explicado que los miembros "tienen miedo de que el cansancio acumulado en tantas horas de corrección afecte a la correcta revisión de los exámenes, estamos hablando de que llegan a superar las 12 horas diarias corrigiendo pruebas".
CSIF remitió un escrito el pasado 30 de mayo a la Delegación Provincial de Educación de Toledo criticando las instrucciones que fijaban la obligatoriedad que han tenido los miembros del tribunal de asistir por las mañanas a su centro educativo y por las tardes a la corrección de exámenes en sus centros correspondientes.
Esta medida, que ha provocado "un exceso del horario de la jornada laboral y la dilación en el proceso de corrección", también supone una situación de "riesgo personal" en el desplazamiento entre centros, en muchas ocasiones con trayectos que han superado la hora de duración.