Un centenar de autobuses y cientos de coches particulares han partido esta madrugada desde Alicante, Almería y Murcia hacia Madrid para protestar por la reducción del trasvase Tajo-Segura. Bajo el lema "En el levante, sin trasvase, desierto y paro", miles de regantes, políticos y representantes socioeconómicos, junto a medio centenar de camiones y tractores, se han congregado a las puertas del Ministerio para la Transición Ecológica por "la muerte del sector agroalimentario" en sus respectivas provincias.
"Recorte travase = más paro", "más desalación más contaminacion", "no al recorte del trasvase Tajo-Segura" o "adiós a la huerta de Europa" son algunas de las frases que se han podido leer en las pancartas paseadas durante la manifestación, a la que han acudido el presidente de Murcia, Fernando López Miras, y la consejera andaluza de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural, Carmen Crespo.
Tanto políticos como agricultores, representantes de las patronales del sector, sindicatos, empresarios y cooperativas argumentan que el nuevo plan aprobado por el Gobierno prevé un recorte paulatino de hasta el 40 % para el año 2027 del agua trasvasada del Tajo que llega al Segura, lo que ha reabierto la "guerra del agua" entre las comunidades receptoras -la valenciana, la murciana y parte de la andaluza- con la castellano-manchega.
García-Page: "No es un capricho político"
Sin embargo, el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page tiene claro que las reivindicaciones de su Gobierno en materia hídrica "no son un capricho político" y considera que "si hoy se está hablando de agua y del trasvase Tajo-Segura es porque nuestra región ha ganado varias sentencias en el Tribunal Supremo para conseguir que el Tajo deje de ser el único río de España sin caudal ecológico".
Durante la presentación del programa de formación de Daher-Airbus, que ha tenido lugar en Albacete, García-Page ha admitido que recibir insultos o ataques por su postura sobre el agua del Tajo va en su sueldo como presidente autonómico, pero ha subrayado que "hemos sido muy moderados" a la hora de exigir que se cumplan las distintas sentencias que dictan caudal ecológico en el Tajo como manda la legislación española y la europea.
Emiliano García-Page durante un acto en Albacete
El líder castellano-manchego ha manifestado que en los 44 años vida del trasvase han cambiado aspectos ambientales y de cambio climático, y el Tajo es el único río del país que no tiene caudal ecológico mínimo debido a que en Levante llevan 44 años "sin moverse ni un centímetro cúbico" de sus posiciones, y esto "no puede ser".
"Castilla-La Mancha ha sido, está siendo y será muy solidaria y nunca faltará agua para el consumo humano, pero hay que debatir cómo se utiliza el poco agua que hay en el Tajo y el poco agua que habrá", ha señalado el presidente reiterando que él será el primero en intentar ayudar a las autoridades del Levante y de Murcia y a sus regantes "para que en España podamos, entre todos, llegar a un consenso sobre una lógica".
"Absoluto respeto" por la manifestación
De su lado, la consejera de Igualdad y portavoz del Gobierno regional, Blanca Fernández, ha mostrado su "absoluto respeto" a la concentración siempre que se desarrolle de forma pacífica y ha dejado claro que Castilla-La Mancha "no quiere guerra del agua", sino que está abierta a alcanzar un acuerdo nacional "sin partidismo, sectarismo ni egoísmo".
A preguntas de los medios en rueda de prensa, Fernández ha señalado que la respuesta del Consejo de Estado a las alegaciones presentadas por las comunidades autónomas al proyecto de Real Decreto aprobatorio de los planes hidrológicos -entre ellas Castilla-La Mancha- no tardarán demasiado.
La consejera de Igualdad, Blanca Fernández
Aunque la Junta no quiere meter presión a este órgano, consideran que tiene un "trabajo sencillo", porque las sentencias del Supremo son "muy clarificadoras" y, según ha avanzado, "sería muy raro" que el Consejo de Estado dijera algo distinto al acuerdo que se abordó en el Consejo del Agua para respetar los caudales ecológicos.
"No es compatible con el interés general"
Por su parte la vicepresidenta tercera del Gobierno y ministra para la Transición Ecológica y Reto Demográfico, Teresa Ribera, ha mostrado su respeto a la preocupación, intereses y la manera en la que los regantes y los distintos actores ven las cosas, pero ha asegurado que "sus demandas no son compatibles con el interés general".
"Nuestra obligación como Gobierno es encontrar la mejor solución desde el punto de vista del interés general y las mejores respuestas para maximizar las soluciones de lo que nos está planteando cada cual. Pero todo a la vez es muy difícil".
Posición del PP
Por último, el PP de Castilla-La Mancha ha resaltado que su posición "de defensa del agua" para la región "nunca ha cambiado" y ha recordado que su partido firmó un pacto regional por el agua.
Así se ha expresado en una rueda de prensa en Toledo la secretaria general de los 'populares' castellano-manchegos, Carolina Agudo, que ha defendido que el PP "nunca ha cambiado la posición de defensa del agua para Castilla-La Mancha" y ha añadido que el presidente regional de los 'populares', Paco Núñez, ha pedido la aplicación del pacto regional por el agua.