Empezamos el año con fuerza. Información exclusiva en El Confidencial con tintes de escándalo en torno al ex más famoso de Castilla-La Mancha: José Bono. Una estrella rutilante de los medios. El turista más pertinaz de la República Dominicana. El mayor goleador que ha tenido nunca la política castellano-manchega. En fin, el todopoderoso Pepe Bono. En portada, a grandes caracteres y con un fotomontaje del propio exministro de Defensa con su hija Amelia, titula la noticia El Confidencial: “Bono y su hija Amelia compran 5 casas en Toledo desde la oficina de un proveedor de Defensa”. Y a partir de ahí, todo son alegrías. Los pisitos de Bono: que si el político y su hija incrementan aún más su “abultado patrimonio familiar”; que si los inmuebles toledanos se han comprado a través de dos sociedades vinculadas a la empresa ciudadrealeña Tecnove, proveedora habitual del Ministerio de Defensa; que si las casas están situadas en el casco histórico de Toledo y valen un pastón… en fin todo un rosario de información “sensible” a la vista de toda España. La noticia hace furor y está corriendo como la pólvora. Atronador.
Está claro que el expresidente, como cualquiera, puede hacer con su dinero particular lo que le venga en gana y está claro también que lleva años fuera de la política activa, aunque lo que anda un poco oscuro, y tal vez convendría darle alguna explicación (luz, más luz), es la interconexión galáctica de estas gestiones patrimoniales con una empresa que es vieja conocida del Ministerio de Defensa, el mismo que Pepe Bono dirigió entre 2004 y 2006, y sobre la que recae desde hace años una gran sombra de sospecha. La exclusiva del citado periódico ofrece todo tipo de detalles que sería lo suyo aclarar, no vayamos a interpretar mal el asunto y pensar, no lo permita la providencia, que aquí se ha cocinado algún chiringuito tirando a escandalera. O alguna puerta giratoria. O algún favorcillo de ida y vuelta. Que seguro que no, pero qué mejor receta que salir al paso, explicar las cosas y luego sentirnos todos más tranquilos: o sea, darle bola al dicho aquel de “de dónde saca pá tanto como destaca”. También puede ocurrir, como tantas veces, que todo se desvanezca como lágrimas en la lluvia. Un clásico.
En fin, cada uno sabrá y Bono es un experto. De la política y los medios. Y ya que estamos en la vida pública, se está poniendo calentito el patio castellano-manchego con la cercanía de las elecciones autonómicas y municipales, que mayo anda a la vuelta de la esquina. Aparte de la pelea habitual de los dos primeros espadas, Emiliano García-Page y Paco Núñez (sólo puede quedar uno), el percal se ha puesto interesante sobre todo en Toledo, con tres nombres de alto nivel y una tensión política que se va a disparar: la alcaldesa socialista Milagros Tolón, el aspirante popular Carlos Velázquez y la candidata-llave de Vox, la diputada Inés Cañizares, que está teniendo un papel protagonista en el Congreso y puede ser la gran sorpresa de Zocodover. El miedo es libre y hay nervios circulando por ahí: la apuesta toledana es fuerte en los tres partidos y la capital regional va a ser la madre de todas las batallas municipales en la región, si bien Tolón parece llevar mucha ventaja en el punto de salida. Veremos.
Total, que con tanto foco toledano nadie habla de David Moreno (David, ¿qué?), el desconocido candidato de Vox a la Presidencia de Castilla-La Mancha que ha pasado desapercibido. Dicen que es talaverano, aunque muchos se preguntan si, entre Page y Núñez, Vox ya ha tirado la toalla en la Junta y ha decidido poner en Toledo toda la carne en el asador. “Ir pá ná”, que diría el gran José Mota. Seguiremos informando.