"El que quiera un presidente doblegado ante sus jefes en Madrid, un dirigente que le haga más caso a ellos que a lo que necesita la gente de su tierra, tiene que votar otro". Así se ha pronunciado este domingo el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, que se ha definido como "el único" de todos los candidatos "que no recibe consignas". "Yo me debo a mi tierra y estoy dispuesto a llevarle la contraria a quien sea con tal de defenderla", ha insistido.
García-Page ha hecho estas declaraciones en el salón de actos de Santa María del Conde de Molina de Aragón (Guadalajara), donde ha estado acompañado por el alcalde y candidato socialista a la relección, Francisco Javier Montes, y por más de 200 personas de la localidad.
El secretario general del PSOE ha recordado las actuaciones que a lo largo de estos años se han llevado a cabo por el desarrollo y porque la población que viva en la denominada “España despoblada” tenga y goce de las mismas prestaciones que el resto de la comunidad. En este sentido, ha subrayado que gracias a la Ley de la Despoblación aprobada por el Gobierno regional, "la zona de España con la presión fiscal más baja son los castellano-manchegos que viven en esta parte".
Castilla-La Mancha, "en buenas manos"
"Nosotros gobernamos para todos y cada uno de los rincones de la región", ha señalado García-Page, que ha presumido de ir "siempre de frente". Por ello, ha pedido el voto a todo el mundo y ha explicado que cuando dice que Castilla-La Mancha está en buenas manos -que es el lema de su campaña- es "porque esas manos están limpias de corrupción y de la basura de la política nacional".
En este contexto, el candidato socialista ha criticado la campaña "sucia" que está haciendo contra él el PP, que "en vez de hacer propuestas, se dedica a insultar", y se ha preguntado sobre la opinión de sus votantes, "que ven cómo sus dirigentes se gastan el dinero en hacer pancartas con montajes en vez de destinarlo a propuestas de futuro para la región".
"En algunos aspectos me costaba pensar que podía haber algún dirigente más radical que Cospedal y en la recta final de la campaña encuentro la explicación, y es que Cospedal dejó a Núñez porque se ha quedado con lo peor de esa época", ha manifestado García-Page, que ha señalado que "yo prefiero ganar en sanidad, en educación y empleo y le dejo al Partido Popular que gane en insultos descalificaciones y mentiras".