El talaverano David Moreno (1979) es el candidato de Vox a la Presidencia de Castilla-La Mancha y a la Alcaldía de Talavera. Casado y con tres hijos, es un experto jurista al que todas las encuestas independientes atribuyen la posibilidad de tener un papel protagonista en la formación del próximo Gobierno de la Junta de Comunidades si las cuentas salen con el Partido Popular de Paco Núñez y entre los dos alcanzan la cifra mágica de al menos 17 escaños en las Cortes autonómicas, que es la barrera de la mayoría absoluta. Su mayor deseo político en estos momentos es desalojar al socialista Emiliano García-Page del Palacio de Fuensalida y emprender un nuevo tiempo en Castilla-La Mancha tomando como modelo el Ejecutivo regional de Castilla y León, en el que Vox tiene una decisiva presencia. David Moreno está convencido de que el domingo 28 de mayo habrá un vuelco político en la región y dará comienzo una era de progreso real para los castellano-manchegos.
¿Con qué expectativas electorales reales llega Vox a estas elecciones en Castilla-La Mancha?
Según han ido avanzando la precampaña y la campaña, estamos notando cómo estamos creciendo. Tenemos muy claro que Vox va a ser el partido que más va a crecer en estas elecciones. Hay una variable que no han tenido en cuenta las encuestas y es que hemos logrado presentar 257 candidaturas municipales en Castilla-La Mancha y hemos superado llegar a más del 83 por ciento del censo electoral, y eso unido al calor de la gente, a cómo se están llenando todos nuestros actos y el aliento y ánimo que nos está dando la gente, esperamos unos grandes resultados. Sobre todo, estamos viendo que cada día que pasa continuamos creciendo. También vamos a tener grandes resultados en muchos municipios de Castilla-La Mancha, vamos a tener alcaldes y muchos concejales, pero tenemos que ser prudentes y dejar que los ciudadanos voten. Los ciudadanos deben saber que los votos a Page le dan fuerza a Sánchez, y nosotros apelamos a esa responsabilidad de que no podemos seguir consistiendo un gobierno del PSOE ni en Castilla-La Mancha ni a nivel nacional. El cambio es muy necesario. Somos un voto seguro, el voto de la alternativa real.
Y si esto lo concretamos en número de escaños que esperan alcanzar en las Cortes de Castilla-La Mancha... Lo digo porque las encuestas hablan de una horquilla de 2 a cuatro diputados de Vox, quien sabe si suficientes para formar gobierno.
Vamos a esperar a que los castellano-manchegos decidan el domingo, pero vamos a superar las previsiones de las encuestas. Estoy seguro de ello. En todos los procesos electorales anteriores hemos superado a las encuestas y en esta ocasión estoy particularmente convencido de que así volverá a ser. Es el sentir de la calle. Castilla-La Mancha necesita un cambio y los castellano-manchegos están viendo que la única alternativa de cambio real en la región sería un gobierno de Vox.
¿Por qué Castilla-La Mancha necesita el cambio que usted dice?
Porque está todo en la región bastante mal. No hay nada más que escuchar a las familias, que están pasando muchas dificultades para llegar a final de mes y se están endeudando más que nunca; las empresas afrontan una situación de gran incertidumbre, con el 47 por ciento inactivas en Castilla-La Mancha, y eso es porque no ven perspectivas positivas. Hace falta ese cambio en Castilla-La Mancha. Y luego si miramos a cualquier otro sector, da igual el sector agrario que el sector industrial, todos están muy tocados, pero principalmente el sector agrario y ganadero. La gente del campo se siente maltratada y hundida por el Gobierno de Emiliano García-Page y estos han sido los peores ocho años para el sector agropecuario de Castilla-La Mancha. Y no lo digo yo, lo dice todo el sector primario de la región. Son constantes las tractoradas, las manifestaciones, las concentraciones. El lunes lo vimos en el debate, había más de 150 agricultores y ganaderos ecológicos protestando a las puertas, y eso se debe a su malestar. Y son profesionales que han visto cómo se han recortado sus subvenciones por parte de la Junta, mientras que en Castilla y León están percibiendo por una siembra de 120 hectáreas más de 18.000 euros, aquí en Castilla-La Mancha apenas perciben 7.000 euros. Y eso es así porque año tras año García-Page ha recortado las ayudas al sector agrario de Castilla-La Mancha, y además se sienten totalmente criminalizados. Sólo reciben prohibiciones, sanciones y limitaciones al uso del agua.
¿La falta de agua es una de las claves del sector?
Obviamente, para poder producir se necesita agua y Emiliano García-Page ha privado a Castilla-La Mancha de las obras hidráulicas que necesita y nosotros tenemos claro que es una gran necesidad invertir en obras hidráulicas. Hay que traer el agua de dónde sea necesario tanto para abastecimiento humano como para modernización de regadíos. Nosotros no es que prometamos que lo vamos a hacer, es que podemos presumir de que lo hemos hecho realidad en Castilla y León. Llevamos 14 meses y allí se ha hecho la única presa que se ha construido en los últimos 30 años y que va a dar abastecimiento de agua a tres municipios y más de 4.500 hectáreas de regadío. Y hemos seguido construyendo balsas de agua para almacenar en la época de abundancia y que se use durante la sequía. Y hemos conseguido modernizar más de 60.000 hectáreas de regadíos.
Deduzco que el campo es un eje central de su campaña electoral. A su juicio, ¿se trata del área que peor ha gestionado García-Page?
Realmente, nos preocupa la situación y el relevo generacional de las explotaciones agropecuarias. Y eso va unido también a la despoblación. En estos últimos ocho años Castilla-La Mancha ha ido perdiendo población en todos sus municipios, principalmente en las zonas rurales. Y eso se debe a que las explotaciones agropecuarias cada vez son menos rentables por todas las limitaciones y la burocracia que ha impuesto el Gobierno de Page. Nosotros queremos simplificar toda esa burocracia, que los trabajadores del campo puedan trabajar en libertad y garantizar un sector primario fuerte y con perspectivas de futuro, atrayendo a nuestra tierra industrias agroalimentarias de transformación. Es un gran sector que puede dar muchos empleos. Si el sector primario funciona, el resto también funciona. Esto es fundamental. Tenemos a los mejores agricultores y ganaderos. Podríamos ser la huerta y el granero de Europa y Page nos ha privado de ello. También hay que generar las condiciones para el sector industrial, que vengan nuevas empresas y las que ya están puedan crecer, y todo ello va de la mano de eliminar burocracia y simplificar los trámites.
No parece una tarea sencilla...
Hay que facilitar los desarrollos industriales que necesita la región. Hay que centrarse en la industria y su potencial generador de empleos. Necesitamos una Formación Empresarial Dual que vaya de la mano del sector empresarial para que dispongamos de trabajadores cualificados.
Ha citado ya varias veces a Castilla y León. ¿Es el modelo a seguir en Castilla-La Mancha? ¿Por qué?
Las cifras lo avalan. Castilla y León está siendo el modelo de éxito y de prosperidad. Y de cambio de rumbo y regeneración económica y creación de puestos de trabajo. Hasta hace unos meses no había diferencia entre Castilla y León y Castilla-La Mancha, tenían los mismos problemas, las mismas dificultades y las mismas leyes ideológicas e incluso los mismos despilfarros. Ha tenido que llegar un Gobierno de Vox a Castilla y León para demostrar que hay otra forma de gestionar y que llega un cambio de rumbo y la prosperidad. Esa prosperidad que ha llegado a Castilla y León es la que queremos traer a Castilla-La Mancha. Queremos hacer de Castilla-La Mancha una tierra de oportunidades, una tierra de crecimiento y sobre todo una tierra que termine con la lacra de la despoblación y del paro en la que nos ha sumido Page.
¿Qué siente David Moreno cuando oye que Vox es un partido de extrema derecha?
Simplemente indiferencia. Reconozco que me duele porque, al intentar calificarnos a nosotros, califican a más de tres millones de votantes, pero solamente por eso. Nuestros votantes y muchos que no lo son saben que eso es mentira. Son etiquetas que intentan colocarnos pero que no se corresponden con ninguna realidad. Ni por las personas que integramos el partido, que somos profesionales de diversos ámbitos que hemos dado un paso a la política decepcionados por el bipartidismo y los políticos de siempre que empeoran nuestro futuro, ni por nuestros votantes. A las personas que estamos en Vox lo que nos preocupa es poner a las personas en el centro de las políticas y poner sobre la mesa una verdadera alternativa para gobernar de una forma diferente. Y sobre todo, cuando luego se ve como gobernamos, nadie nos puede achacar estas etiquetas porque no se corresponden con la realidad. Todo eso ya está superado. Hemos demostrado lo seguro y lo fiable que es nuestro partido. Somos los únicos que cumplimos lo que decimos y los ciudadanos confían en nosotros y por eso obtenemos cada vez mejores resultados y no paramos de crecer.
Da la sensación de que los candidatos autonómicos de Vox están haciendo una campaña de perfil bajo con el objetivo de potenciar la marca del partido y el liderazgo nacional de Santiago Abascal. ¿Lo ve también así?
No, simplemente es que somos un partido joven con candidatos autonómicos jóvenes. Somos diferentes al resto de partidos y no hacemos como los demás, que hacen promesas que luego no cumplen. Nosotros sí cumplimos y ponemos ejemplos reales como Castilla y León. Nos tomamos muy en serio nuestros compromisos y por eso somos un partido fiable, sincero, útil y necesario y lo estamos demostrando. Y sobre todo que cumplimos lo que decimos, es nuestra gran diferencia. En nuestras candidaturas y equipos tenemos grandes profesionales, muy cualificados, de larga trayectoria y con mucha capacidad de gestión, y preparados para gobernar como hemos hecho en Castilla y León en las tres consejerías, con profesionales del ámbito que están gestionando y no políticos que van en unas listas. Y eso es lo que queremos traer a Castilla-La Mancha, poner a nuestros equipos a gestionar con verdaderos profesionales que sepan solucionar los problemas reales que sufre nuestra región.
Si las cuentas salen el domingo y PP y Vox suman y pueden formar gobierno en Castilla-La Mancha, ¿cuáles serían sus exigencias para apoyar la hipotética investidura de Paco Núñez como presidente de la Junta?
Nuestro prioridad son las líneas programáticas de nuestro programa de gobierno. Esa es la prioridad. Nosotros tenemos claro que el Partido Socialista no puede seguir gobernando Castilla-La Mancha porque tiene a la región en la ruina y en la miseria, y nos aboca a la quiebra. La prioridad de Vox es sacar al Partido Socialista y a García-Page del Gobierno y generar una alternativa real, sólida y de buena gestión, como hemos hecho en Castilla y León, pero sobre todo lo que nos importan son las medidas concretas de nuestro programa de gobierno porque sabemos que son las recetas que necesita Castilla-La Mancha. Para nosotros esto es lo más importante, no los sillones.
¿Y cuáles son esas líneas programáticas fundamentales?
Las fundamentales son la defensa del sector agrario, la eliminación de la burocracia y los trámites absurdos, la defensa de la sanidad pública y el refuerzo de las plantillas, la carrera profesional sanitaria, una educación de calidad y en libertad en la que los padres puedan elegir la educación de sus hijos, el cheque escolar, una educación compatible entre la pública y la concertada, y unas garantías para las escuelas de educación especial y que puedan seguir funcionando como referente asistencial para las personas con discapacidad y, sobre todo, terminar con las altas cifras de desempleo de la región. Hay que ayudar al sector empresarial, que son los generadores de empleo, rebajar drásticamente los impuestos, eliminar innumerables tasas que no tienen sentido y generan duplicidad, y que el dinero esté en el bolsillo de los ciudadanos. También hay que dar ayudas a los jóvenes para acceso a la vivienda y que se puedan emancipar y apoyar a todos los que tengan iniciativa para el emprendimiento. Hay que generar confianza en la gente, que todo el mundo pueda salir adelante con su esfuerzo y su trabajo y que todos tengamos futuro aquí en Castilla-La Mancha. Y que dejemos de perder población.
Sobre García-Page y Paco Núñez
- Emiliano García-Page es el candidato de Pedro Sánchez. Ha intentando desentenderse de las políticas de Sánchez, pero por la mañana parece que se enfada con él, a mediodía le hace la pelota y por la tarde vota exactamente lo mismo que Sánchez y, al final, gestiona exactamente igual que él. Page es un presidente agotado, y lo vimos el lunes en el debate. Un presidente sin ilusión y se palpa que pierde las elecciones, y eso lo pudo ver toda Castilla-La Mancha. Page es el responsable de la grave situación que tiene Castilla-La Mancha. Es el responsable de haber endeudado a Castilla-La Mancha en más de 2.000 millones de euros en sus ocho años de gobierno. Y es el responsable de que el campo esté arruinado y no tengamos una sanidad y unos servicios públicos de calidad. Su etapa debe darse por terminada.
- Paco Núñez podría haber hecho mucho más en la oposición, como hemos demostrado concejales de Vox en muchos ayuntamientos. Desde la oposición podría haber abierto cajones y levantado alfombras y no lo ha hecho. Y por eso es tan necesario que estemos dentro de las instituciones, porque nosotros venimos a trabajar y a servir a los ciudadanos de Castilla-La Mancha. Y no vamos a defraudar como han hecho Page y el PP cuando han gobernado.
¿Exigiría, por tanto, al PP firmar un programa de gobierno de forma previa a la formación de ese gobierno?
Ya lo hicimos en Andalucía en 2018, con 22 o 23 medidas, y no exigimos sillones, sino siempre medidas concretas, firmadas y con publicidad. Pero también hemos visto como el PP las ha incumplido y por eso tenemos que estar dentro de los gobiernos para garantizar que esas medidas se lleven a cabo y para poner a los verdaderos profesionales a gestionar y sacar adelante a Castilla-La Mancha.
¿Qué consejerías serían importantes para Vox en caso de formar un gobierno de coalición con el PP?
No estamos pensando en ello. Ahora mismo estamos transmitiendo nuestro proyecto de gobierno a los ciudadanos y serán los castellano-manchegos los que decidan este domingo con su voto la fuerza que vamos a tener. Si el campo se une, si los autonómos, los profesionales, las familias de Castilla-La Mancha optan por un cambio real y nos dan su confianza, nosotros garantizaremos como única alternativa real que ese cambio llegue a las instituciones de Castilla-La Mancha y consigamos sacar de este agujero a esta región. Tenemos potencial, tenemos patrimonio, tenemos a los mejores productores, tenemos muchas posibilidades de crear empleo en el ámbito rural, de diversificar actividad y hacer que Castilla-La Mancha sea una región no de paso, sino de que nuestra gente se pueda quedar y también puedan venir de fuera. Todo esto es lo que realmente nos importa. Tenemos las recetas para los problemas que arrastra Castilla-La Mancha y tenemos a las personas capacitadas para gestionarlo y sacar adelante a la región.
No ha citado ninguna consejería, pero en sus palabras sobrevuela una bastante clara que sobresale sobre las demás, y es la gestión del campo, el sector agropecuario, que está muy presente en toda la entrevista...
Sí, porque el campo lo tienen criminalizado, lo tienen abandonado y lo tienen abocado a la desaparición. Y nosotros lo queremos proteger. Una de las primeras medidas que vamos a tomar será derogar la Ley de Agricultura Familiar. No vamos a consentir que haya ninguna capacidad de expropiación de tierras a nuestros agricultores. García-Page aprobó esta ley hace aproximadamente un mes y medio y eso genera una inseguridad tremenda para el sector agrario.
¿Qué haría Vox en un hipotético escenario en el que el PP fuera el más votado este domingo en Castilla-La Mancha? ¿Dejarían que Núñez formase gobierno sin más, con su abstención o un apoyo indirecto?
Lo hemos estado viendo en otras regiones. Donde gobierna el PP en solitario al final gobierna exactamente igual que el PSOE. Hasta hace 14 meses no había diferencia entre Castilla y León y Castilla-La Mancha. El PP dice una cosa durante la campaña pero cuando llega el momento de gestionar se acomodan y hacen otra. Se olvidan de los problemas reales de los ciudadanos y es más de lo mismo. No cambian ninguna política ideológica, ni ninguna ley y todo continua prácticamente igual. Nosotros lo que queremos es garantizar que ese cambio real se produce en Castilla-La Mancha y para eso la única opción es el proyecto que representa Vox.
En todo caso, ¿con Paco Núñez usted podría entenderse bien para alcanzar un acuerdo, no?
Nosotros nos entenderemos siempre y cuando garanticemos que el programa de Vox se va a llevar a cabo porque es el necesario para Castilla-La Mancha. Los políticos estamos para llegar a entendimientos, pero siempre que eso sirve para solucionar los problemas reales de los ciudadanos. Sabemos que en toda negociación salen aristas, pero por eso es tan importante que los castellano-manchegos reaccionen y den un gran resultado a Vox para que cuanto antes entremos en la senda de la prosperidad.
¿Qué debe cambiar por completo en Castilla-La Mancha?
Lo primero que hay que hacer es poner a las administraciones al servicio de los ciudadanos. No puede ser que el Gobierno de Page utilice a las instituciones para gestionar como si la región fuera su cortijo. Las administraciones deben ser cercanas, de calidad, de puertas abiertas, y dar soluciones reales a los ciudadanos, especialmente en los centros sanitarios y servicios públicos esenciales. Hay que priorizar el dinero público y destinarlo a unos servicios públicos y sociales de calidad, en educación, en sanidad y en todos los servicios sociales. El Gobierno de Page lo tiene todo de una forma muy precaria y con muchas dificultades, y ahí está el tercer sector.
Si usted fuera el próximo presidente de Castilla-La Mancha, ¿cuáles serían sus tres primeras medidas?
En primer lugar, eliminar todo gasto político superfluo, porque de esa forma vamos a poner destinar más dinero y recurso a lo realmente importante, que es la sanidad, la educación y los servicios sociales. En segundo lugar, reducir burocracia y eliminar trámites sin sentido para facilitar el emprendimiento y el trabajo. Y en tecer lugar, dar apoyo y escuchar a todo el sector agrario y a los empresarios, y ponernos a su disposición para solucionar los problemas reales de la sociedad.
Qué le respondería a un ciudadano que le preguntara, ¿qué ha venido Vox a hacer a Castilla-La Mancha?
Hemos venido a cambiar el rumbo de Castilla-La Mancha. A sacar a la región del endeudamiento, la pobreza y la ruina en la que nos tiene sumidos García-Page. Y a hacer de Castilla-La Mancha una tierra de prosperidad, de futuro y de trabajo para nuestros jóvenes. Y a crear unos servicios públicos y sociales de calidad. Eso es lo que queremos. Demostrar que se puede gestionar de otra forma y que Castilla-La Mancha puede ser una tierra de oportunidades en lugar de una tierra en la que los jóvenes se tienen que marcha después de tantos años de socialismo en la región.
¿Qué propone Vox en concreto para impulsar el mundo rural tan importante en Castilla-La Mancha?
Además de todo el apoyo ya mencionado al sector agrícola y ganadero, el mundo rural necesita una fiscalidad especial. No se pueden pagar los mismos impuestos en las zonas rurales que en los centros de las grandes ciudadades. Y esa fiscalidad pasa por todos los estamentos de los impuestos. Bajar el IRPF autonómico, reducir los impuestos que atañen a la actividad económica y crear bonificaciones para los sanitarios y funcionarios que elijan trabajar en las zonas rurales, además de compensar con medidas fiscales bonificadas para todos aquellas familias del ámbito rural.
Otro problema importante en algunas zonas de Castilla-La Mancha es la okupación. ¿Qué soluciones tiene Vox?
Es un gran problema y cada es vez es mayor porque se ha consentido. Ningún partido del Gobierno, ni del PSOE ni del PP, han tomado medidas hasta ahora para solucionar la ocupación ilegal y eso ha hecho que vaya aumentando. El problema ya no se circunscribe a La Sagra o el Corredor del Henares, sino que la okupación está llegando a municipios del ámbito rural que no lo podían ni imaginar o a municipios medios como Tarancón que están teniendo graves problemas. La okupación se ha convertido en un modelo de vida. Los okupas no se plantean otra opción que seguir okupando, porque la ley los está amparando. Nosotros vamos a impulsar con carácter inmediato en Castilla-La Mancha una ley antiokupación, de tal forma que se pueda desahuciar a cualquier okupa en un plazo de 24 o 48 horas, o lo antes posible. Estamos comprometidos para proteger a los propietarios y proteger la propiedad privada. Si una familia, por cualquier circunstancia, atraviesa por una dificultad, y eso lo entendemos, para eso está la administración para dar soluciones de forma momentánea o circunstancial. Lo que no puede ser es que los propietarios asuman los problemas que genera la okupación, entre otros delincuencia y problemas de convivencia, y eso lo sufren los vecinos afectados. Este problema lleva aumentando dos décadas y ni el PSOE ni el PP han dado soluciones, y tendrá que ser un Gobierno de Vox el que diga hasta aquí hemos llegado.
Ha citado con insistencia los servicios sociales. ¿Qué plantea en este ámbito tan importante?
Nuestro compromiso es muy firme con los servicios sociales. Si hablamos de dependencia, por ejemplo, no puede ser que los ciudadanos esperen uno o dos años hasta que llegan las valoraciones y mucha gente no llega ni a conocerlas porque fallecen antes. Nosotros también estamos comprometidos con mejorar con fuerza los servicios sociales y el Tercer Sector. Soy consciente, y conozco muchas asociaciones del Tercer Sector, de que hacen una grandísima labor en todos los aspectos, y en muchos casos no llega la administración. Nosotros queremos garantizar al ciudadano estos servicios y la continuidad a todas las entidades que hacen esa gran labor tan importante.
Si gobiernan PP y Vox, ¿cómo será Castilla-La Mancha dentro de cuatro años?
Castilla-La Mancha será muy diferente a la que existe ahora. Habremos solucionado graves problemas. Donde ahora hay paro, habremos generado empleo. Habremos cambiado el rumbo. Habrá agua donde ahora no hay agua. Y obras hidráulicas. Y una sanidad de calidad con una carrera profesional sanitaria. Y los ciudadanos estarán bien atendidos. El escenario será muy diferente pero no dentro de cuatro años, sino dentro de un año, como hemos demostrado en Castilla y León. Vamos a cambiar la forma de gobernar desde el primer día, vamos a escuchar a todos los sectores e ir de la mano con ellos para resolver los problemas que no han tenido solución hasta ahora.
Por último, para cerrar ya la entrevista, ¿cuál es el horizonte de Vox con el liderazgo de Santiago Abascal?
Santiago Abascal está demostrando que somos la única alternativa y la única oposición al Gobierno de la traición que representa Pedro Sánchez. Enfrente están todos los partidos y enfrente de todos ellos sólo está Vox, por eso somos la única alternativa. Está haciendo un grandísimo trabajo al frente de los 52 diputados de Vox y, tras el crecimiento de este domingo, cuando lleguen las generales el crecimiento va a ser mucho mayor. Toda España lo está viendo. Abascal es un presidente cercano, sencillo y humilde, que escucha a las personas, y que puede ir a cualquier pueblo de España y ser recibido con mucho cariño.
¿No cree que Alberto Núñez Feijóo sea una alternativa al sanchismo?
Para nada. Feijóo es un nacionalista convencido. Podría estar igual en el PP que en el PSOE. Ha gobernado su región, en Galicia, como un barón socialista, y hoy Galicia arrastra parecidas dificultades a las de Castilla-La Mancha. El efecto Feijóo se ha desvanecido, no representa al verdadero presidente que necesita España. Está decepcionando a toda la derecha y el centro derecha de España.