Sergio Gutiérrez (Escalona, Toledo, 1982) es el hombre fuerte del PSOE de Castilla-La Mancha, donde desempeña el cargo de secretario de Organización desde octubre de 2017. Mano derecha del secretario general de los socialistas castellano-manchegos y presidente de la Junta de Comunidades, Emiliano García-Page, también forma parte del Grupo Parlamentario Socialista en el Congreso desde 2019. En las elecciones generales del próximo domingo volverá a encabezar la lista electoral de su partido en la circunscripción de Toledo y aspira a repetir como diputado.
Recibe a este periódico en la sede regional de su formación política, en pleno casco histórico de Toledo, para contestar a esta entrevista electoral y explicar como, pese a todas las discrepancias de los socialistas castellano-manchegos con Pedro Sánchez, votar PSOE sigue siendo, a su juicio, la mejor opción para defender los intereses de Castilla-La Mancha y de España, sobre todo los de las clases bajas y medias.
La precampaña empezó tensa en el PSOE toledano por la inclusión de la exalcaldesa de la capital, Milagros Tolón, en la lista electoral al Congreso, una imposición de Ferraz que no gustó a la cúpula de la Federación socialista castellano-manchega, que protestó públicamente. Pero Gutiérrez asegura que agua pasada no mueve molino y que la situación se ha normalizado para poder hablarles a los ciudadanos de lo que realmente les importa. Cree que Sánchez le puede doblar el pulso a las encuestas y ganar las elecciones del 23-J contra pronóstico y que, ocurra eso o lo contrario, García-Page seguirá siendo presidente de Castilla-La Mancha porque es su única aspiración.
Pregunta. ¿Por qué el PSOE de Pedro Sánchez conviene más a los toledanos y a los castellano-manchegos al frente del Gobierno de España que el PP de Feijóo?
Respuesta. Es importante votar basándose en la trayectoria de cada partido. Durante los siete años que gobernó el PP, en la provincia de Toledo no hubo inversión en infraestructuras, nos quitaron el agua con el trasvase y dejaron aparcados los proyectos estratégicos de la región. Todo eso lo hemos revertido desde el PSOE. Mientras que Rajoy impuso un recorte 15.000 millones de euros en la sanidad y en la educación, el Gobierno socialista ha aumentado las transferencias a las comunidades autónomas para que puedan invertir más en la sanidad y en la educación; mientras que el PP aumentó con el memorándum de la vergüenza la capacidad de trasvasar agua del Tajo al Segura, ahora el PSOE ha aumentado los caudales ecológicos del Tajo en Toledo y Talavera; mientras que el PP dejó caducar la declaración de impacto ambiental del AVE Madrid-Lisboa a su paso por Talavera, el PSOE ha multiplicado por tres el dinero para la ejecución del proyecto en los Presupuestos Generales del Estado. Por tanto, pensando en el interés de Toledo y de Castilla-La Mancha, se ha portado infinitamente mejor este Gobierno socialista que el anterior del PP.
P. Me he referido intencionadamente al PSOE de Pedro Sánchez porque no se parece mucho al PSOE de Emiliano García-Page, que ha sido muy crítico respecto a cuestiones sensibles como los pactos con Podemos o los independentistas, con la supresión del delito de sedición y la reforma del de malversación o la ley del 'solo sí es sí'. ¿Teme que muchos votantes de Page el 28-M se conviertan el 23-J en votantes del Feijóo?
R. A esas personas les diría que piensen en la defensa de los intereses de Castilla-La Mancha. Es evidente que el presidente Page ha discrepado en ocasiones con el presidente del Gobierno de España, pero lo ha hecho porque siempre ha antepuesto los intereses de la región a los del propio partido. Por eso, precisamente, le han votado mayoritariamente los castellano-manchegos. Y con ese aval pedimos ahora el voto desde el PSOE de Castilla-La Mancha. Durante esta campaña electoral el PP se ha comprometido en Valencia y en Murcia a aumentar la cantidad de agua trasvasada y ni el alcalde de Toledo ni el de Talavera de la Reina, que son de ese mismo partido, se han atrevido a levantar la voz para defender el agua que pasa por sus ciudades. ¿No es eso mucho más triste que algunas discrepancias internas en asuntos concretos para defender el interés regional?
"Si Feijóo cree que Vox es malo para España, también debería ser malo para las ciudades de Castilla-La Mancha"
P. Le leo unas palabras de Feijóo en una entrevista reciente concedida a EL ESPAÑOL: "Vox no es un buen socio, me siento más cercano a Page, si necesito 20 escaños voy a hablar con el PSOE". ¿Cómo las analiza?
R. Con perplejidad, porque no contestó a la carta del PSOE de Page para evitar los pactos con Vox en los ayuntamientos de la región. Los socialistas de Castilla-La Mancha ofrecimos a Feijóo la abstención para que el PP gobernara en solitario en los ayuntamientos de Ciudad Real, en Albacete o en Puertollano a cambio de que respetaran la lista más votada en Toledo, en Guadalajara o en Talavera de la Reina. El PP ni siquiera respondió a esa carta. Si Feijóo cree que Vox es malo para España, también debería ser malo para las ciudades de Castilla-La Mancha donde les han metido en el gobierno. Las palabras se las lleva el viento.
P. Imagine que, como dicen las encuestas, el PP como claro ganador de las elecciones, pero sin mayoría suficiente para investir a Feijóo. ¿El PSOE debería abstenerse para dejarle gobernar y evitar a la vez que Vox forme parte del Consejo de Ministros?
R. Primero, sinceramente, creo que el PSOE puede ganar las elecciones. Los socialistas vamos a pelear por ser la primera fuerza el próximo domingo. Pero si el PP gana las elecciones y quiere tener credibilidad en esto, antes de pedir la abstención al PSOE tendrán que hacer dimitir a los alcaldes de Toledo, Guadalajara o Talavera de la Reina y dejar que en esas ciudades también gobierne la lista más votada. Y la semana que viene, cuando se constituirá la Diputación de Toledo, también tendrán que demostrar que no quieren gobernar con Vox y que tienen la voluntad de respetar que gobierne la lista más votada, que en este caso ha sido la del PSOE.
P. De concretarse ese escenario, posiblemente al primer barón socialista al que va a llamar Feijóo para pedirle la abstención será a Page. ¿Realmente se podría plantear ese cambio de cromos?
R. No veo factible esa posibilidad, pero porque no hay voluntad real por parte del PP. Cada vez que se acercan unas elecciones piden la abstención para que gobierne la lista más votada, pero aquí el único partido que se ha abstenido para que gobernase Rajoy fue el PSOE. Una decisión que, por cierto, se tomó con un debate interno muy fuerte en el que participó Emiliano García-Page. Esa nunca nos la han devuelto desde el PP, aunque se lo pedimos hace cuatro años.
P. A pocos días de las elecciones parece que la duda que se ha instalado en los medios ya no es quién va a ganar las elecciones, sino por cuánto las va a ganar el PP. ¿Cuál sería un buen resultado para el PSOE?
R. Un buen resultado para el PSOE sería ganar las elecciones y un mal resultado para el conjunto del país sería que el PP y Vox sumen. Quien todavía tenga alguna duda de que Feijóo y Abascal iban a llegar a un acuerdo para formar gobierno, que me diga un solo ayuntamiento, diputación o comunidad autónoma en el que no hayan pactado cuando han tenido la posibilidad de hacerlo. Incluso en Extremadura, lo que demuestra que el PP no ha permitido dejar de pactar con Vox ni siquiera a los candidatos que no querían hacerlo, que han tenido que acabar haciéndolo a rastras. ¿Después de lo que ha pasado tras el 28-M, por mucho que ahora diga el señor Feijóo, alguien puede dudar de que van a pactar?
"Votar a Sumar en Castilla-La Mancha es darle una oportunidad a que el PP y Vox sumen"
P. ¿Qué tiene que pasar en las últimas horas de campaña para que el PSOE doble el pulso a las encuestas y acabe ganando las elecciones?
R. La receta es conseguir la movilización de una parte del electorado progresista que está ahora mismo en la abstención y la concentración en el PSOE del voto de izquierdas. En Castilla-La Mancha, es muy obvio que todo voto que vaya a Sumar significará restar para la izquierda. Votar a Sumar en todas y cada una de las provincias de Castilla-La Mancha es darle una oportunidad a que el PP y Vox sumen.
P. ¿Pero le parece más confiable Yolanda Díaz como posible socia de gobierno que las dirigentes de Podemos Irene Montero o Ione Belarra? Lo digo porque son las impulsoras, respectivamente, de las leyes del 'solo sí es sí' y de Bienestar Animal, muy criticadas por el PSOE de Castilla-La Mancha.
R. Dentro de la propia confluencia de Sumar han tenido debates muy visibles y creo que han llegado a conclusiones similares que las del PSOE de Castilla-La Mancha. De hecho, han excluido a Irene Montero de las listas electorales. En cualquier caso, pedimos el voto porque cuando más fuerte y autónomo esté el PSOE, mejor será para el país. El PSOE ha demostrado en los últimos años que, mientras que otros estaban en el ruido, ha estado en la gestión y ha gestionado bien, desde el punto de vista de la economía, de las infraestructuras, de la industrialización, de la digitalización... Han sido los ministros y las ministras del PSOE los que han soportado el peso de la gestión. Por lo tanto, si queremos buena gestión y nos queremos ahorrar el ruido, hay que votar por los que han demostrado que saben gestionar bien.
P. ¿Superar el 45 % de voto cosechado por Page el 28-M es una quimera con vistas al 23-J? ¿Tira más la marca Page que la marca Sánchez?
R. En la historia de la región siempre ha habido más voto al PSOE autonómico que al estatal, y es algo que ya pasaba incluso en la época de Felipe González. En Castilla-La Mancha aglutinamos un voto regionalista que se diluye en las generales. El PSOE de Castilla-La Mancha es el gran receptor, a izquierdas y a derechas, de la gente que cree que somos la mejor opción para defender y hacer a Castilla-La Mancha. Es difícil llegar el domingo a ese 45 % de voto, pero ser primera fuerza en votos y mantener el número de diputados es una opción todavía posible.
"Mi relación personal con Milagros Tolón es buena. Estamos haciendo campaña juntos prácticamente todos los días"
P. La confección de las listas electorales en la provincia provocó un duro enfrentamiento entre el PSOE de Castilla-La Mancha y Ferraz, que impuso la inclusión de la exalcaldesa toledana Milagros Tolón. ¿Ha sanado ya esa herida interna en el socialismo toledano?
R. El proceso dejó jirones y unas sensaciones que se podrían haber evitado. Las cosas se podrían haber hecho infinitamente mejor, pero ahora estamos todos centrados en el objetivo común de ganar las elecciones. Mi relación personal con Milagros Tolón es buena, estamos haciendo campaña juntos prácticamente todos los días y todos hemos entendido que no podíamos seguir hablando de nosotros mismos, porque cada vez que lo hemos hecho hemos perdido la oportunidad de hablar de los derechos de los trabajadores y de las mujeres, de que hay que seguir incrementando el salario mínimo o de que hay que mejorar las pensiones para que no pierdan poder adquisitivo, que es realmente lo que está en juego en las próximas elecciones.
P. ¿Teme que la polémica pueda tener un coste electoral para el PSOE en la provincia de Toledo?
R. Creo que no. Estamos haciendo una buena campaña para explicarle a los toledanos que con un gobierno del PP la pensión media de los castellano-manchegos no habría llegado a los 800 euros y ya hemos sobrepasado los 1.000 o que hemos conseguido aumentar la renta disponible de los ciudadanos de Castilla-La Mancha, reduciendo así la desigualdad con las regiones más ricas de España. Nos comprometemos a impulsar un gran pacto de Estado de redistribución de la riqueza para seguir cohesionando el país social y territorialmente.
P. Han sido días intensos para Emiliano García-Page, que ha tenido que preparar su discurso de investidura, su toma de posesión y formar el nuevo Gobierno de Castilla-La Mancha. ¿Cómo explica que el gran activo del socialismo castellano-manchego no haya hecho campaña para las generales junto a Pedro Sánchez en la región?
R. No ha sido una campaña al uso, ha sido diferente. Prueba de ello es que, en Castilla-La Mancha, ha dado más mítines Emiliano García-Page que Pedro Sánchez, que se ha centrado más en los medios de comunicación, en las entrevistas, que en los actos públicos. Y que conste que no es una crítica. En resumen: todos los días que ha tenido disponibles Emiliano García-Page libres de sus responsabilidades como presidente regional ha participado en la campaña electoral.
"El único interés y la única aspiración de Page es seguir siendo presidente de Castilla-La Mancha"
P. ¿Emiliano García-Page aspirará a ser secretario general del PSOE si el 23-J supone el fin del sanchismo?
R. Lo que tengo claro es que, gobierne quien gobierne en España, desde el 24-J Emiliano García-Page va a cruzar el puente del Tajo cientos de veces para seguir pidiendo a los ministros del Gobierno de España justicia con Castilla-La Mancha, tanto en materia de agua, como de infraestructuras o de asuntos sociales, para que salden la deuda de 500 millones que el Estado con nuestra comunidad autónoma por la dependencia. El único interés y la única aspiración de Emiliano García-Page es seguir siendo presidente de Castilla-La Mancha.
P. ¿No le ve entonces como líder del PSOE?
R. En Castilla-La Mancha, sí. (Ríe).
P. Por último, dígame tres iniciativas que vaya a impulsar Sergio Gutiérrez como diputado nacional del PSOE para mejorar la vida de los toledanos y los castellano-manchegos.
R. En los presupuestos de 2022 se incluyeron 600 millones de euros para la provincia de Toledo, el triple que en el mejor año de los siete que estuvo gobernando Mariano Rajoy. Eso nos ha permitido tener muchos proyectos ya enjaretados y que están a mitad de ejecución. Dicho esto, hay varias cosas que nos importan mucho: queremos la liberalización total de la autopista de peaje AP-41 para facilitar la movilidad entre Toledo y Madrid, ya que la A-42 está colapsada; tenemos que mejorar la conexión por Cercanías con más frecuencias desde Illescas y la reapertura del apeadero de Seseña; nos comprometemos a acelerar el tramo Madrid-Oropesa del AVE a Extremadura después de que el PP dejase caducar la declaración de impacto ambiental; hay que desdoblar la N-5 en Talavera de la Reina y mejorar los accesos por carretera al Polígono de Toledo con el puente de Azucaica, además de conectar cuanto antes la A-40 con la A-4, que va a evitar mucho tráfico, sobre todo pesado, a la capital.