El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha recibido este jueves en el Palacio de Fuensalida a la futbolista Alba Redondo y a la preparadora física Blanca Romero, ambas campeonas del mundo con la Selección femenina.
"Tengo el honor de recibir a dos campeonas, aunque solo una le dé a la pelota. Con todas las la de la ley", ha expresado, a la vez que ha anunciado que ambas serán reconocidas en la celebración del Día de Castilla-La Mancha el próximo 31 de mayo.
"Hay algo que en las últimas semanas me ha removido como presidente y ciudadano. Ver cómo un éxito de este tamaño se ha visto relegado a un segundo lugar, aunque se ha puesto el punto sobre las íes a la batalla de fondo del esfuerzo de la Selección".
Para Page, se trata de un éxito para tener "envidia" y el "reconocimiento que merece". "Ganar un campeonato del mundo, todo el mundo deduce que es algo muy difícil. Habéis superado obstáculos. Recuerdo perfectamente los debates en la calle en los momentos más duros, cuando había que explicar alguna derrota".
Además del homenaje, la intención del Ejecutivo autonómico es elevar reconocimiento "como se merece", el próximo 31 de mayo, cuando quiere que el Gobierno y el conjunto de la región aplauda el éxito de las dos paisanas.
"Batalla de la igualdad"
Asimismo, el presidente ha valorado como positivo de entre toda la polémica que "una batalla deportiva esconde una batalla más de fondo, que es la de la igualdad".
Un concepto que tras la "controversia" de la final del Mundial revela que depende "de presupuesto, de símbolos y de las actitudes". "Tenemos que sentirnos, no vigilados, pero sí responsables".
Agradecimiento de Redondo
Por su parte, Alba Redondo ha mostrado el agradecimiento suyo y de la familia por el tratamiento recibido en los últimos días tras su victoria mundialista.
"Gracias por el apoyo al deporte y al fútbol femenino de la región. Llevamos la bandera de la región con orgullo a la final. Aceptamos con mucha ilusión ese recibimiento".