El coordinador regional de Izquierda Unida, Juan Ramón Crespo, ha pedido públicamente este miércoles al presidente de la Junta, Emiliano García-Page, que la reforma del Estatuto de Castilla-La Mancha que están negociando el PSOE y el PP se limite exclusivamente a cambiar la ley electoral y que, posteriormente, se convoquen nuevas elecciones autonómicas de las que salga un Parlamento regional "más justo y democrático". Esa nueva Cámara autonómica sería la encargada, según Crespo, de llevar a cabo la reforma del Estatuto.
Crespo ha mostrado su preocupación por la forma en que PP y PSOE están acometiendo la reforma del Estatuto de Autonomía, y propone que dicha reforma se haga en profundidad y que se abra a toda la sociedad castellano-manchega a través de unas Cortes regionales elegidas de "forma justa y democrática".
"No podemos permitir que se haga en una mesa camilla entre el PP y el PSOE de espaldas a la sociedad castellano-manchega", ha declarado el coordinador regional, que ha alertado de la preocupación que le genera que la información que tiene de la reforma del Estatuto de Castilla-La Mancha les llegue, como al resto de los ciudadanía, "por las filtraciones interesadas que está haciendo el PP o el PSOE, o tal vez los dos".
Tapón democrático
"Por dichas filtraciones conocemos que la reforma se está centrando en la Ley Electoral, de la que el presidente de Castilla-La Mancha, dijo el pasado 31 de mayo, en el acto institucional del Día de la Región, que era necesario reformar para eliminar el tapón democrático de un sistema electoral deficitario", ha criticado Crespo, según ha informado el partido.
"No podemos permitir que un asunto tan importante como la reforma del Estatuto se centre exclusivamente en cambiar la Ley Electoral y no aborde en profundidad el resto de problemas", ha dicho el líder de la federación de izquierdas, para quien "lo más grave es que al final la reforma del Estatuto, la ley más importante de Castilla-La Mancha, sea aprobada en unas Cortes regionales elegidas por un sistema electoral 'deficitario' que supone un 'tapón democrático'. Esta forma de hacerlo supondría una total incoherencia democrática", ha calificado.
"Por ello, Izquierda Unida propone que la reforma del Estatuto de Castilla-La Mancha se limite a reformar la Ley Electoral, para conseguir una Ley Electoral justa y con todas las garantías democráticas, que facilite la elección de unas Cortes Regionales que represente realmente a la sociedad castellano manchega. Una vez aprobada esa Ley Electoral, el presidente regional, en virtud del artículo 22 del actual Estatuto, debe disolver las Cortes y convocar nuevas elecciones. Y deben ser, esas nuevas Cortes, elegidas de forma justa y democrática, las que deben embarcarse, con absoluta legitimidad, en la reforma en profundidad del Estatuto de Castilla-La Mancha", ha defendido.
Considera el líder de IU que ese nuevo texto ha de ser una herramienta útil "para combatir la despoblación, defender el agua, acometer la transición ecológica, blindar derechos, introducir nuevas formas de participación política de la ciudadanía, industrializar nuestra región y modernizar la agricultura, que debe ser motor económico de la región".