"Lo que sucedió es enormemente grave y creo que hay que investigarlo por terrorismo". Así de rotundo se ha manifestado este lunes el presidente socialista de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, sobre la decisión del Tribunal Supremo de investigar por terrorismo al prófugo Carles Puigdemont, huido de la Justicia española desde 2017.
En un encuentro con alumnos de periodismo en la Facultad de Comunicación de Cuenca, Page ha dejado claro que los sucesos de Cataluña fueron "muy graves" y "son de lo más extraordinario que ha pasado en negativo contra la Constitución española", más allá -ha dicho- del golpe de Estado del 23-F.
"Resulta duro entender que lo que pasó en Cataluña fue terrorismo", ha manifestado el presidente de la Junta, para añadir a continuación: "Pero dicho esto, creo que hay que investigarlo por terrorismo".
No comparar con ETA
Aunque ha dicho que, desde su punto de vista, el independentismo catalán tal vez no tenía conciencia de que el procés se pudiera "conceptualizar como terrorismo", Page se ha mostrado abiertamente partidario de investigar los hechos como terrorismo porque lo sucedido "fue muy grave, sobre todo si hubiera triunfado, enormemente grave".
El líder de los socialistas castellano-manchego ha dicho no tener claro si los tribunales terminarán catalogando o no como terrorismo los acontecimientos de Cataluña, pero "investigar se tiene que investigar", si bien también se ha mostrado contrario a comparar lo que pasó en Cataluña "con el terrorismo de ETA". "Son cateogrías diferentes", ha dicho.
Como ha informado EL ESPAÑOL, la Sala Penal del Tribunal Supremo acordó el pasado jueves, por unanimidad, abrir una causa al expresidente catalán Carles Puigdemont, por su relación por el movimiento Tsunami Democràtic, al que se investiga en la Audiencia Nacional por presuntos delitos de terrorismo, entre otros.
La amnistía prometida
La decisión -que desautoriza la posición mantenida por la teniente fiscal del Supremo, María Ángeles Sánchez Conde- se produjo a seis días de que termine el plazo para que PSOE y Junts lleguen a un acuerdo en el Congreso respecto al alcance de la amnistía prometida por Pedro Sánchez a cambio de los votos de los diputados de Puigdemont a su investidura como presidente del Gobierno.
La Sala que tomó esta decisión ha estado presidida por Manuel Marchena e integrada, por turno de reparto, por Julián Sánchez Melgar, Juan Ramón Berdugo (ponente), Carmen Lamela y Eduardo de Porres.
Los magistrados concluyen que respecto a Puigdemont y Wagensberg es “necesario y pertinente que sean llamados al procedimiento, a fin de ser oídos como investigados, con todos los derechos y garantías previstas en nuestro ordenamiento jurídico. Diligencia de investigación que no puede realizar el instructor [de la Audiencia Nacional], sino solo esta Sala Segunda por tratarse de aforados”.
El alto tribunal, que viene a dar la razón a la mayoría de la junta de fiscales del Supremo, adopta esta decisión después de analizar la exposición razonada elevada por el magistrado de la Audiencia Nacional, Manuel García-Castellón, en la que exponía los indicios que a su juicio acreditan la participación de los dos aforados en los hechos investigados. La instructora del procedimiento será la magistrada Susana Polo.
"Estrés político escandaloso"
Por otro lado, sobre la situación política que actualmente vive España, Page ha dicho que "no hay que confundir la estabilidad del país con la estabilidad de un gobierno" pero considera que hay mucho "ruido" en la política española y que se vive "un estrés político escandaloso".
El presidente castellano-manchego cree que la sociedad española es estable y que España lleva su ritmo, con buenos datos económicos y con los servicios públicos en funcionamiento, pero cree que, por el contrario, la política "no está generando certidumbre, sino desasosiego" en estos momentos.
Pero España "como país, es estable", ha dicho el dirigente socialista de Castilla-La Mancha. Para García-Page “tendría que ser un objetivo de la nueva política y de la aportación de las nuevas generaciones, evitar el frentismo, que tiene mucho que ver con el populismo. El populismo, al fin y al cabo, es una engañifa”.
“La clave de este tiempo es la certidumbre. La certidumbre viene cuando se sabe lo que se quiere ser. Cuando vamos al minuto, sincera y llanamente, es muy difícil”, ha considerado el jefe del Ejecutivo castellano-manchego.