La llegada a España de una lengua de polvo del Sáhara está provocando que la calidad del aire se vea seriamente perjudicada en numerosos puntos de Castilla-La Mancha, lo que supone un riesgo para la salud pública a causa del incremento exponencial de partículas en suspensión.
Según ha informado el Gobierno autonómico este domingo, la presencia de masas de aire sahariano ha hecho que se supere el umbral de información a la población por material particulado (PM10) en Ciudad Real, Puertollano, Guadalajara, Cuenca y Los Yébenes (Toledo).
Ante este episodio extraordinario e infrecuente de calima, el Ejecutivo regional ha considerado necesario trasladar al conjunto de la población una serie de medidas de prevención para reducir el impacto de este fenómeno.
[La AEMET avisa de lluvia de barro en Castilla-La Mancha este domingo: las zonas afectadas]
Entre ellas, ha recomendado a las personas con problemas respiratorios, ancianos y niños evitar actividades al aire libre y a la población en general que limite la realización de esfuerzos físicos prolongados en el exterior.
Lluvias de barro
La presencia de la borrasca Olivia ha envuelto este fin de semana a Castilla-La Mancha en una densa calima que ha hecho subir las temperaturas por encima de los 30 grados, registros nada habituales en esta época del año. Sin embargo, la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) ha avanzado un cambio de tiempo para este domingo, con un descenso térmico en buena parte del país.
Según la previsión de la AEMET, es posible que en algunas zonas de la región se registren "lluvias de sangre", que no es otra cosa que precipitaciones en formas de barro por culpa del polvo en suspensión que hay en la atmósfera.
Durante toda la jornada se producirán intervalos de nubes medias y altas que podrían llevar aparejadas lluvias débiles y algún chubasco en el tercio occidental y noroeste de Guadalajara por la mañana. Por la tarde, estas precipitaciones, que serán dispersas y ocasionalmente en forma de tormenta, podrían producirse por toda región a excepción del extremo sureste, donde se abrirán grandes claros.