Poco ha durado la tregua en Castilla-La Mancha. Después de un fin de semana en la que el paso de un DANA provocaba tormentas muy intensas acompañadas de fuertes rachas de viento y granizo en la provincia de Guadalajara y en algunos puntos de Toledo, las alertas regresan.

Este martes, la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) ha elevado un aviso amarillo que afecta a la parte más oriental de la región por la posibilidad de que se formen chubascos importantes que pueden grandes cantidades de agua en poco tiempo. 

Concretamente, la alerta afecta a las comarcas de la Serranía de Cuenca y Guadalajara, La Mancha en Cuenca y Albacete, además de Hellín y Almansa (Albacete) y las Parameras de Molina (Guadalajara), uno de los lugares más afectados por la DANA del fin de semana. 

Estas precipitaciones en forma de lluvia o granizo pueden darse por la mañana en Guadalajara, sobre todo en zonas de montaña, con la posibilidad de que se extiendan por la tarde también al este de Cuenca y al este y sur de Albacete, momento en el que serán localmente fuertes en la Ibérica.

Por lo demás, se esperan temperaturas en ligero descenso en la mitad occidental y Guadalajara que será más acusado en el cuadrante suroeste y con pocos cambios en el resto. El viento soplará flojo variable con predominio en horas centrales del oeste y suroeste y virando a partir de la tarde a componente este en la mitad oriental.

Las temperaturas oscilarán entre los 20 y los 31 grados en Albacete, entre los 19 y los 33 en Ciudad Real, entre 19 y 30 grados en Cuenca, entre 18 y 29 grados en Guadalajara y entre 19 y 32 grados en Toledo.