El consejero de Hacienda, Administraciones Públicas y Transformación Digital de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, Juan Alfonso Ruiz Molina, ha salido al paso de manera contundente de las afirmaciones de la portavoz de la Ejecutiva del PSOE, Esther Peña, justificando este miércoles la entrega a Cataluña de la gestión del cien por cien de los impuestos en que ya existen otros territorios como Cuenca, Soria y Teruel con una "fiscalidad diferencial".

"Nos quieren tomar por tontos", ha asegurado una de las voces más contundentes del Gobierno de Page en materia de financiación en los últimos tiempos durante una entrevista en Radio Castilla-La Mancha donde ha pedido a Ferraz "mayor seriedad" en este debate.

"Decir que Soria, Teruel y Cuenca tienen un sistema singular de financiación, desde luego es insultar no solamente a esas tres provincias, sino a todos aquellos que estamos peleando por tener un sistema de financiación que permita la igualdad de los ciudadanos", ha agregado Ruiz Molina.

Esta reacción del consejero castellano-manchego se ha producido apenas un día después de que Esther Peña defendiera el cupo catalán acordado con ERC a cambio de su apoyo a la investidura de Salvador Illa como presidente de la Generalitat de Cataluña, comparándolo con la situación fiscal que tienen estas tres provincias para combatir la despoblación.

"Yo quiero recordar que la primera fiscalidad diferencial y singular que hay en este país la tienen Teruel, Soria y Cuenca y nadie puso el grito en el cielo", aseguraba.

En cualquier caso, Ruiz Molina ha incidido en que la implementación de esta medida depende de una reforma en la ley que tiene que abordarse en el Congreso de los Diputados. "Si llega, habrá que ver y analizar la letra pequeña y ver de qué manera tiene encaje la Constitución o no lo tiene, o de qué manera perjudica claramente los intereses de la región", ha avisado.

Comité Federal en Ferraz

Un asunto, el del acuerdo con ERC, que centrará el Comité Federal que el PSOE celebrará este sábado en su sede de la calle Ferraz de Madrid y donde se testará hasta donde llega el apoyo del partido a Sánchez después de que varias federaciones hayan mostrado de manera pública su desacuerdo.

El principal acelerador de esas divergencias internas fue el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, quien nada más conocerse el contenido del acuerdo con ERC hacía una declaración institucional en la que emplazaba a su partido a no apoyar un pacto que calificaba de "bochornoso, obsceno y grosero".

Como ya ocurriese hace diez meses, el barón castellano-manchego acudirá este sábado a la sede de su partido como la voz más crítica contra las políticas de Sánchez dentro del PSOE. En octubre de 2023, con la Ley de Amnistía sobre la mesa, fue el único que tomó la palabra para situarse frontalmente en contra de su aprobación, una postura que le valió algunas críticas de "deslealtad" por parte de algunos compañeros.

Ahora, con la financiación autonómica en juego y algunos barones territoriales más criticando la cesión a Cataluña, está por ver hasta donde llegan los apoyos internos a Page.