El otoño llegará de golpe a Castilla-La Mancha esta semana. La llegada de una DANA (Depresión Aislada en Niveles Altos) de bajo impacto y un frente frío provocarán inestabilidad y una importante bajada de temperaturas que comenzará a notarse a partir del miércoles. 

Durante la primera parte de la semana, la nubosidad se reducirá al extremo norte peninsular, según ha explicado este lunes el portavoz del Agencia Estatal de Meteorología (AEMET), Luis Bañón.

Así las temperaturas experimentarán una leve mejoría respecto a los días anteriores llegando a los 31 grados que se esperan en Ciudad Real y Toledo. 

No obstante, a partir del martes la situación empezará a cambiar. Para ese día se espera la llegada de una DANA que se aproximará por el extremo oeste peninsular y que pese a no tener un alto impacto que podría tocar a la parte más oriental de la región. 

Estos cambios se notarán de manera especial a partir del miércoles. A la formación de esta depresión se sumará una dorsal atlántica que, favorecida por las bajas presiones de Escandinavia y del Mediterráneo, dirigirá una masa de aire frío bastante potente para esta época del año.

"Esta situación no se trata de un refrescamiento típico de septiembre, si no de una situación bastante anómala, ya que dará lugar a temperaturas anormalmente bajas para las fechas", avisan desde Meteored, donde predicen un descenso térmico por debajo de los 6 grados en algunas zonas de la meseta norte durante la noche.

La bajada generalizada de los termómetros se notará especialmente durante la jornada del jueves, mientras que de cara al viernes y el fin de semana, se prevé una estabilización del tiempo que mostrará una situación más cercana a la habitual en esta época del año.