El Gobierno de Emiliano García-Page ha puesto en marcha el trámite de los Presupuestos de Castilla-La Mancha para 2025, con un techo de gasto de 8.315 millones de euros aprobado ya en las Cortes autonómicas y el objetivo de que las cuentas regionales entren en vigor el próximo 1 de enero. Se trata de unos presupuestos "inversores" que no prevén "ninguna subida de impuestos".
Así lo explicado este miércoles en rueda de prensa la consejera portavoz del Ejecutivo autonómico, Esther Padilla, quien ha informado de que el Consejo de Gobierno de la Junta ha tomado en consideración el anteproyecto de Ley de los Presupuestos Regionales y lo ha enviado al Consejo Consultivo para que emita el correspondiente dictamen. Se trata de la ley más importante del año.
Ese límite de gasto no financiero de 8.315 millones con el que contará Castilla-La Mancha para el año que viene, lo que se conoce popularmente como techo de gasto, supone una variación al alza del 4,5 por ciento respecto a 2024, un incremento que, según viene explicando el Gobierno de Page, es posible gracias a la "estabilidad política" de la región y permitirá "blindar" los servicios públicos y la sociedad del bienestar en la comunidad.
Rechazo de la oposición
Este techo de gasto fue aprobado el pasado 5 de septiembre por el pleno de las Cortes de Castilla-La Mancha con el único voto favorable del PSOE y el rechazo del PP y Vox, lo que ha llevado a la consejera portavoz a pedir a la oposición que reconsidere su postura y apoye unas cuentas que Padilla ha calificado como "muy buenas" para la región. La consejera se ha dirigido especialmente al PP para que "corrija su error" y salga de su posición "negativa", apoyando el crecimiento de Castilla-La Mancha.
Una vez que se reciba el informe del Consejo Consultivo sobre este anteproyecto de ley, el Consejo de Gobierno lo incorporará al texto y seguirá la fase de aprobación del proyecto de ley de presupuestos para su remisión en las Cortes.
Continuará su periplo parlamentario con el debate de enmiendas que quieran aportar los diferentes grupos, en las comisiones de distintas áreas, y después se sustanciará la aprobación final en el pleno de las Cortes de Castilla-La Mancha. Como viene informando EL ESPAÑOL-EL DIGITAL CLM, tanto el PP como Vox, los dos partidos de la oposición, han criticado este techo de gasto y no creen que vaya a servir para mejorar los servicios públicos de la región.
Rechazo al cupo catalán
El consejero de Hacienda, Juan Alfonso Ruiz Molina, explicó el pasado mes de agosto los principales componentes de este techo de gasto para 2025. El primero de ellos son los ingresos propios no financieros, ascienden a 8.247 millones de euros, variando con respecto al anterior ejercicio en un 4,6 por ciento. De esta cifra ha remarcado que el 88 por ciento, es decir 7.257 millones, son los ingresos que le corresponden a Castilla-La Mancha provenientes del sistema de financiación vigente.
Un elevado porcentaje que, como ha indicado Ruiz Molina, “pone de manifiesto la importancia que para la región tiene abordar de manera urgente la reforma del sistema de financiación autonómica” y que ha enlazado con el “absoluto rechazo” que desde el Gobierno de Castilla-La Mancha se ha manifestado al acuerdo entre el PSC y ERC, avalado por el Gobierno de España, y que establece un concierto económico entre la Generalitat y el Estado.
Ruiz Molina precisó que el doce por ciento restante, es decir, 990 millones, “se corresponde con los ingresos de carácter tributario que gestionamos desde la Administración regional y los provenientes de otras administraciones, como el Estado o la Unión Europea”. Estimación que según ha recalcado el consejero, se realiza “con la máxima prudencia”.
Escenario positivo
El segundo componente es el déficit autorizado para el próximo ejercicio. En este punto el consejero ha recordado que, tal y como se acordó en el Consejo de Política Fiscal y Financiera del pasado mes de julio, “éste es del 0,1 por ciento del PIB regional, lo que supone unos 55 millones de euros”, que, pese a que fue rechazado junto al techo de gasto para 2025, va a ser el indicador que desde el Ejecutivo autonómico se va a usar para elaborar el presupuesto regional.
Y finalmente, la última magnitud, ya que los ingresos procedentes del fondo REACT UE no se han estimado al haberse ejecutado en su totalidad, son los ajustes de contabilidad nacional, que suman 12,3 millones de euros y que son aquellos ajustes que se deben realizar para que el techo de gasto sea fijado en términos de contabilidad nacional.
En todo caso, y tal como viene explicando el Gobierno de Castilla-La Mancha, este techo de gasto se ha elaborado en el marco de un "escenario macroeconómico muy positivo", tanto para España como para la región, reflejado en los informes de los principales estudios que estiman un crecimiento sostenido de la economía regional, tanto en 2024 como en 2025.