El entorno de Pedro Sánchez no ve deseable ni razonable lanzar una operación política para desalojarEmiliano García-Page de la Secretaría General del PSOE de Castilla-La Mancha. Un movimiento interno que nadie ha puesto en marcha desde Ferraz, al menos hasta el momento, y que tendría que concretarse con vistas al Congreso Regional que los socialistas castellano-manchegos celebrarán los días 18 y 19 de enero en Toledo.

Aunque la posibilidad de intentar desalojar al barón más crítico está sobre la mesa a través de las primarias, que habría que convocar si más de un candidato a secretario regional consigue los avales para ello, todas las fuentes cercanas a Ferraz y Moncloa consultadas por EL ESPAÑOL-EL DIGITAL CLM coinciden y trasladan el mismo mensaje: el relevo de Page no tiene sentido hoy por hoy y "Sánchez no tiene previsto hacer este movimiento interno" en Castilla-La Mancha, pese a las fuertes discrepancias y enfrentamientos públicos de ambos líderes socialistas.

Page tiene a favor, en este sentido, no solo ser el presidente de la Junta de Comunidades, sino gozar de una mayoría absoluta -la única de un socialista en toda España- que le da un amplio respaldo político y social en la región. Un liderazgo "que no debe tocarse", según coinciden las fuentes a las que ha tenido acceso este periódico.

"No es factible"

"No es factible, no tiene viabilidad pensar en la sustitución de Page en Castilla-La Mancha", explican dirigentes nacionales próximos a Sánchez. "Page no sólo es el secretario general del PSOE de Castilla-La Mancha sino que, además, es el presidente de la comunidad y tiene un amplio apoyo en el partido", opinan en este ámbito, tal como, por otro lado, quedó reflejado en el Comité Regional que los socialistas castellano-manchegos celebraron el pasado 21 de septiembre, donde Page salió ovacionado.

"Cambiar a un presidente autonómico -afirma un alto cargo socialista en Castilla-La Mancha- no tiene precedentes". Y añade: "Nunca en la historia del PSOE se ha movido la silla a un presidente de comunidad autónoma y, por tanto, no creo que eso vaya a ocurrir ahora, no lo veo probable".

Otra cosa, explican, es que algunos líderes territoriales que no gobiernan en sus regiones, como pueden ser los casos de Andalucía o la Comunidad de Madrid, sí puedan ser sustituidos por Ferraz en sus respectivos congresos regionales, "pero el caso de Page, obviamente, es diferente".

Operación de riesgo

Un dirigente madrileño considera, en este sentido, que maniobrar desde Ferraz para echar a Page "sería un tanto escandaloso", además de una "operación de riesgo" en la que Sánchez no tiene garantías de salir airoso.

Otras fuentes del partido opinan, al respecto, que a Sánchez incluso puede venirle bien tener enfrente a un díscolo como Page, ofreciéndole así "una excusa que evidencia la pluralidad que internamente existe en el PSOE".

Todas las fuentes consultadas, incluso en el propio Gobierno de Sánchez, son conscientes de la dificultad de una operación así, aunque reconocen que Page se ha convertido en una "china" en el zapato del presidente del Ejecutivo central.

Respetar a un presidente

Pese a los intensos rumores, toma fuerza, por tanto, entre los socialistas la idea de "respetar a un líder político que preside un gobierno autonómico" y dejar que el Congreso Regional de enero se celebre sin sobresaltos, sin primarias y con Page reforzado en su papel como secretario general.

De hecho, el propio Page, tanto en su intervención en el citado Comité Federal como en declaraciones posteriores a los medios, ha recordado a Sánchez que es "el presidente de Castilla-La Mancha" y sería "contradictorio" que el inquilino de la Moncloa pida protección para él en el Congreso Federal convocado para finales de noviembre en Sevilla y a la vez trate de mover la silla del líder castellano-manchego.

En este sentido, Page se ha venido reivindicando como presidente de Castilla-La Mancha y ha recordado el criterio de Ferraz de defender a los presidentes y no quitarles sus responsabilidades, más aún cuando, como en su caso, tiene mayoría absoluta y un sólido liderazgo en el PSOE regional.

Seis años sin verse cara a cara

Sea como sea, lo cierto es que la delegada del Gobierno en Castilla-La Mancha, Milagros Tolón, se ha autodescartado esta semana y ha dejado claro que no competirá con Page por la Secretaría General del PSOE de Castilla-La Mancha, aunque sigue sonando el nombre de la ministra de Vivienda, la ciudadrealeña Isabel Rodríguez, como hipotética alternativa, si bien fuentes de su entorno niegan esa posibilidad.

Page y Sánchez se han visto ocasionalmente varias veces a lo largo de los últimos años, pero su último cara a cara oficial y bilateral tuvo lugar hace seis años, en concreto, el 15 de octubre de 2018, lo que pone de manifiesto el distanciamiento político y personal que existe entre ambos.

Como se sabe, Sánchez va a recibir a Page el próximo viernes, 4 de octubre, en el palacio de la Moncloa, en el marco de la ronda de encuentros bilaterales que el presidente del Gobierno está manteniendo con los presidentes regionales para hablar de la financiación autonómica e intentar calmar la fuerte polémica que este asunto está provocando en la política española por el cupo catalán.