Diciembre puede ser un mes clave para desbloquear las negociaciones del nuevo Estatuto de Castilla-La Mancha, rotas por el PSOE el pasado 25 de octubre tras una repentina enmienda del PP para limitar a 35 la horquilla de diputados en las Cortes autonómicas, en lugar de los 59 que hasta ese momento se habían acordado entre ambos partidos.
Fuentes de la negociación consultadas por EL ESPAÑOL-EL DIGITAL CLM han confirmado que los equipos del PSOE y el PP han tomado ya contacto preliminar para emplazarse a una reunión antes de Navidad con el objetivo de encontrar una salida al bloqueo actual y que se pueda avanzar en el diseño del nuevo Estatuto, con el que se pretende dar un impulso autonómico para las próximas legislaturas y blindar los grandes servicios públicos.
La importancia del documento que está en juego ha llevado a los equipos de Emiliano García-Page y Paco Núñez a plantearse seriamente retomar esta negociación con una primera reunión en diciembre que, en todo caso, no está convocada todavía ni tiene una fecha fijada para su celebración. Sí hay una clara voluntad de ambos partidos para reunirse y acabar con la ruptura actual de una negociación de la que, como se sabe, Vox se ha quedado fuera.
Consenso roto
El PSOE ha confirmado a nuestro periódico que llamará al PP para celebrar este encuentro, mientras fuentes del entorno de Núñez afirman desconocer oficialmente que vaya a haber ninguna reunión, aunque dejan claro que "si el Gobierno nos llama acudiremos a hablar de cualquier asunto".
Los nombres clave de los equipos negociadores son, por parte del PSOE, Sergio Gutiérrez, Fernando Mora e Isabel Abengózar, bajo la supervisión directa de los dos vicepresidentes de la Junta, José Luis Martínez Guijarro y José Manuel Caballero. Y por parte del PP Carolina Agudo, Santiago Lucas-Torres, Antonio Serrano y Tania Andicoberry.
El punto de partida de este nuevo acercamiento es la intención de "no tirar por la borda" el alto grado de consenso que los negociadores de Emiliano García-Page y Paco Núñez habían conseguido en los asuntos esenciales del nuevo Estatuto, pactados en un total de 40 enmiendas conjuntas, un consenso roto exclusivamente por las diferencias en la horquilla de escaños en el Parlamento de Castilla-La Mancha.
Por sorpresa
Aunque el PP pretendía seguir adelante con la negociación manteniendo la llamada "enmienda 41" para establecer los 35 diputados, el PSOE rompió la negociación el citado 25 de octubre acusando a los populares de "deslealtad" al plantear in extremis una horquilla que rompía por sorpresa el consenso alcanzado para fijar en 59 los escaños en las Cortes.
Esa propuesta número 41 hizo saltar por los aires todo el consenso anterior y abrió un clima de tensión entre el PSOE y el PP que todavía no se ha cerrado. El PSOE entiende, en este sentido, que "si se incumple un acuerdo, se incumplen todos, si se revisa un acuerdo, se revisan todos", tal como han asegurado fuentes de la dirección socialista consultadas por EL ESPAÑOL-EL DIGITAL CLM.
De hecho, estas fuentes aseguran que el PSOE "pedirá explicaciones" al PP por el cambio de criterio sobre la horquilla de diputados ya pactada y se intentará, a la vez, acercar las posiciones ahora tan distintas. "No entendemos esa ruptura, el número de 59 escaños lo puso el PP después de rebajar una propuesta nuestra para llegar hasta los 65, de manera que fue una sorpresa cuando de pronto, el último día, se descolgaron con la enmienda de los 35 diputados", afirman fuentes socialistas.
Negociación "de legislatura"
El PSOE recuerda, en este sentido, que la negociación tiene "carácter de legislatura" y que incluye tres grandes ejes: nuevo Estatuto, reforma de la Ley Electoral y reforma del reglamento de las Cortes de Castilla-La Mancha.
"Es un pacto global, si se incumple un acuerdo, se incumple todo", insisten desde estas fuentes socialistas. Sobre las "consecuencias" de las que advirtió el propio Page si la negociación sigue rota, el PSOE no quiere entrar en eso, pero sí aclara que afectaría a puntos esenciales del "inicio de la negociación", sin entrar en más detalles.
A la espera de que las conversaciones puedan recomponerse, hay "optimismo" en el PSOE sobre la recuperación del proceso negociador, sobre todo por la importante de los tres grandes asuntos a abordar. "Imperará la palabra dada", afirman estas fuentes.