La condonación de parte de la deuda de las comunidades autónomas anunciada este viernes por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en la Conferencia de Presidentes que se celebra en Santander, ha puesto en guardia al Gobierno de Castilla-La Mancha, que exigirá, además de esa quita, un fondo transitorio de compensación para equilibrar su estatus actual de región infrafinanciada.
Así lo han confirmado fuentes del Ejecutivo autonómico consultadas por EL ESPAÑOL-EL DIGITAL CLM, que han dejado clara la misma posición que mantienen desde hace años: cualquier acuerdo de financiación que suponga una quita de la deuda autonómica debe ir acompañado, en el caso de Castilla-La Mancha, de un mecanismo complementario que compense la infrafinanciación actual de la comunidad.
Esta misma reclamación la vienen planteando desde hace tiempo las otras tres regiones que acompañan a Castilla-La Mancha en el ranking de las "objetivamente infrafinanciadas", y que son Comunidad Valenciana, Murcia y Andalucía.
En tres meses
La quita que ahora anuncia Sánchez tendrá que concretarse en el Consejo de Política Fiscal y Financiera previsto para el mes de enero, según el compromiso del presidente del Gobierno.
Page, por su parte, ha planteado en una intervención en la Conferencia de Presidentes que "en tres meses" el Gobierno de Sánchez presente un "borrador marco sobre la reforma del modelo de financiación autonómica", y que, entre tanto, "no haya más documentos de ningún tipo", en una posible alusión a un acuerdo exclusivo con Cataluña, el conocido como cupo catalán.
El Gobierno de Page defiende, y ha vuelto a defender este viernes en Santander, "un modelo de financiación autonómica único para todas las comunidades del régimen común", buscando la "igualdad" en todos los territorios.
Multimillonaria deuda
Castilla-La Mancha, según los datos oficiales, tiene actualmente una deuda global de más de 16.500 millones de euros, de los cuales más de 13.000 millones corresponden a la deuda pública con el Estado, de manera que la quita puede representar un importante caudal de dinero para la región, aunque hay que concretar los términos y porcentajes reales de la condonación.
En este sentido, el Ejecutivo de Emiliano García-Page, que asiste a esta Conferencia de Presidentes, ha dejado claro que la propuesta de Sánchez se analizará con todo detalle, y en ningún caso de aceptará ni que haya privilegios para ninguna comunidad ni una quita que no incluya ese fondo de compensación que Castilla-La Mancha reclama desde hace años.
"Todo dependerá ahora de los criterios que el Gobierno central ponga sobre la mesa", afirman las citadas fuentes: "Tenemos que ver esa quita, si realmente es una condonación de verdad para todos, si es lineal o no y qué criterios se aplican", aseguran desde el Ejecutivo de Page, donde opinan que "debe reconocerse que hay cuatro comunidades que estamos infrafinanciadas".
Más de 5.300 millones
A finales del pasado año, tal como informó EL ESPAÑOL-EL DIGITAL CLM, el Gobierno de Castilla-La Mancha ya planteó que una quita del 20 por ciento, que era la que entonces se planteaba para Cataluña, supondría una cifra de más de 2.500 millones de euros para Castilla-La Mancha, a la que habría que sumar el fondo transitorio de compensación y el millonario ahorro de los intereses como consecuencia de la propia quita.
Esa cifra fue posteriormente elevada hasta los 5.300 millones de euros por el consejero de Hacienda y Administraciones Públicas de la Junta, Juan Alfonso Ruiz Molina, que ya el pasado año dejó claro que Castilla-La Mancha no se conformará "solo" con la quita.
En estos momentos, con la Conferencia de Presidentes celebrándose en Santander, el Ejecutivo de Page espera que la negociación se lleve a cabo entre todas las autonomías, sin "singularidades" para ninguna de ellas.
Igualdad en la financiación
En este contexto, el propio Ruiz Molina ha reclamado este viernes en la Conferencia de Santander un modelo "de igualdad en la financiación por habitante ajustado, principio con el que ya no tenemos que hablar de ordinalidad ni de que las comunidades que tienen más capacidad fiscal tengan derecho a mejores servicios públicos”.
Es decir, Castilla-La Mancha pide un nuevo modelo de financiación que garantice la "igualdad de derechos de todos los españoles ante los servicios públicos fundamentales".
“Es contradictorio hablar de un modelo singular para Cataluña, sin tener en cuenta las singularidades que tenemos todas las comunidades autónomas a la hora de prestar los servicios públicos que son de nuestra competencia”, ha explicado el consejero.
Multilateralidad
En este sentido, Sánchez también se ha comprometido a negociar "entre todos un nuevo modelo de financiación autonómica que concilie la multilateralidad y la bilateralidad, blinde la solidaridad entre territorios, y garantice que todas las comunidades reciban más recursos de los que reciben hoy".
Con esta fórmula, Sánchez busca acallar las críticas de los barones socialistas, encabezados por Emiliano García-Page, y atender al mismo tiempo el compromiso que ha adquirido con ERC para otorgar a Cataluña un régimen de financiación privilegiado, que permitirá a la Generalitat recaudar el 100% de los impuestos.
En todo caso, todo apunta a que Sánchez va a chocar contra el Estado autonómico en esta Conferencia de Presidentes con el 'concierto catalán', ya que 14 comunidades del PP y 2 del PSOE le dirán 'no' en Santander.