Pese a llevar unos cuantos meses en su cargo y también en la política, Vicente Casañ se ha hecho un hueco entre los políticos más populares de Castilla-La Mancha. El primer edil de Albacete, que lo será durante dos años en virtud al pacto de investidura suscrito entre su partido Ciudadanos y el PSOE, no para de dejar imágenes muy comentadas.
La última ha tenido lugar este sábado en su visita a la Casa de Aragón de la ciudad manchega. Casañ no ha dudado en arremangarse la camisa y atreverse con una sartén de huevos fritos. De su destreza culinaria y su habilidad para conseguir la puntilla, han podido dar cuenta los allí presentes.
Y es que desde que en campaña se llevara de cañas a su primo, el célebre cómico Ernesto Sevilla, a Casañ no se le pone nada por delante.