Las prestaciones económicas públicas para las familias más pobres de Castilla-La Mancha se encuentran bloqueadas desde septiembre de 2019 en la provincia de Albacete, según un comunicado que firman 27 profesionales del Programa Regional de Acción Social (PRAS).
Los firmantes han explicado en un comunicado difundido este jueves que este bloqueo afecta al Ingreso Mínimo de Solidaridad (IMS) y a las ayudas de Emergencia Social (AES) y del Plan contra la Pobreza Energética (PPE).
Han explicado que Castilla-La Mancha tiene ahora "algo más de 130.000 personas en pobreza severa" y que, como la Administración autonómica se fija en los casos más extremos, los fondos no cubren las necesidades básicas de las familias que "no encuentran trabajo o a las que el trabajo que realizan no les aporta ingresos suficientes".
Estas prestaciones, "se solicitan y tramitan desde los servicios sociales de los ayuntamientos, pero las estanterías están vacías, falta presupuesto y falta una planificación ordenada, adaptada a las urgencias de las familias pobres, que se van manifestando en cualquier momento del año".
Sobre las ayudas del Plan contra la Pobreza Energética, ha detallado que ante "bloqueo" de estos recursos de subsistencia durante un par de meses, hasta mediados de noviembre, se han tramitado ayudas de 150 euros, con un máximo de dos pagos anuales, "algo que se parece más a una limosna que a una protección social digna".
Los firmantes del comunicado han ampliado que la prestación del IMS, que se concede a familias durante períodos de seis meses, prorrogables durante otros seis mientras se encuentran sin otra fuente de ingresos, está "bloqueada desde el mes de septiembre".
En cuanto a las Ayudas de Emergencia Social, prestaciones económicas de un único pago, entre 600 y 2.000 euros, para afrontar gastos urgentes que requieren una actuación inmediata, "el presupuesto para este año se ha quedado tan corto que a comienzos de diciembre aún no se han resuelto y pagado las solicitudes presentadas en mayo", ha concluido.