La sección segunda de la Audiencia Provincial de Albacete tiene previsto juzgar este lunes 7 de marzo a dos hombres acusados de haber provocado tres focos de fuego en Hellín (Albacete), concretamente en la zona entre el Camino de las Columnas y la carretera de Liétor.
Los hechos ocurrieron el 3 de agosto de 2020 y los dos acusados, ambos de nacionalidad española, fueron prendiendo fuego a matorrales y otros elementos combustibles en diversos puntos de su camino, poniendo en peligro la vida de vecinos.
Así consta en el escrito de acusación del Ministerio Fiscal, al que ha tenido acceso Efe, y en el que se pide una indemnización de 1.138 euros para el Servicio Provincial de Extinción de Incendios (SEPEI) por la labor prestada para sofocar el fuego.
Tres focos
El escrito recoge que originaron tres focos de fuego, uno de los cuales, al prender llamas en un gran descampado en el Camino de las Columnas, en su parte inicial, "se propagó rápidamente hacia la carretera de Liétor".
El segundo foco lo iniciaron al final del mismo camino, en una zona cercana a varias viviendas, y el tercero en un lugar cercano al convento de las Hermanas Clarisas, por lo que los Bomberos se vieron obligados a cortar el tráfico e intervenir para sofocar los focos.
El escrito detalla que uno de los vecinos de la zona, que reside en una vivienda unifamiliar, se vio obligado a abandonar precipitadamente su vivienda y que las llamas carbonizaron varios árboles del interior de su parcela y la valla perimetral que la protege.
Otro vecino también se vio obligado a abandonar su vivienda, ya que las llamas quemaron la valla perimetral y varios árboles del interior de su parcela y hubo un tercer afectado, que reside en una vivienda unifamiliar ubicada en el mismo Camino de las Columnas, que sufrió el fuego en su propiedad. Las llamas quemaron su valla de celosía, el seto y la tela plastificada que estaba puesta para el perro.
Plenamente conscientes
El fiscal considera que "los acusados eran plenamente conscientes de que, con sus acciones, pondrían en peligro la vida o integridad física de las personas y obraron con voluntad de ello o, en todo caso, se imaginaron que con sus actos podrían resultar afectados estos bienes jurídicos y, pese a ello, decidieron actuar".
Los tres vecinos afectados no han reclamado indemnización por los daños causados en sus parcelas.