Las salas de la Cumbre de la OTAN promocionan enclaves emblemáticos de España, como el Roque de los Muchachos en la isla de La Palma o los Jardines del Generalife en Granada. Uno de ellos es de Castilla-La Mancha: El Castillo de la localidad albaceteña de Almansa.
La veintena de salas que acogerán los encuentros bilaterales entre los líderes mundiales tienen el nombre de un municipio español y sus paredes presentan fotografías que reflejan la belleza de algunos de los rincones más especiales de España.
De esta forma, dos de los tesoros que esconde la isla de La Palma, que tras la erupción del volcán recobra ahora la normalidad, estarán presentes en la cumbre: una panorámica de la Caldera de Taburiente se muestra en la oficina de Estados Unidos mientras que el Roque de los Muchachos se exhibe en la oficina española.
Murales con imágenes de España visten muchos de los pasillos y espacios más amplios. Los enclaves que estarán representados en la cumbre son el pueblo de Potes (Cantabria), el Castillo de Olite (Navarra), el Monasterio de San Juan de la Peña (Aragón), el Roque de los Muchachos (Canarias), el Castillo de Almansa (Castilla-La Mancha), Peñíscola (Comunidad Valenciana), el Castillo de Bellver (Islas Baleares), el Castro de Baroña (Galicia), los Jardines del Generalife (Andalucía), las murallas de la Ciudad de Ceuta, Caravaca de la Cruz, (Región de Murcia), el Acueducto de los Milagros (Extremadura), Vall de Boí, (Cataluña), Durango (País Vasco), el Castillo de Cornago (La Rioja), el Castillo de Manzanares el Real (Madrid), Segovia (Castilla y León), Cudillero (Principado de Asturias), el Faro de la Ciudad de Melilla y la Caldera de Taburiente (La Palma).
“El Abrazo” de Juan Genovés
En una de las principales salas de la Cumbre de la OTAN, la llamada ‘VIP Holding Room’, destinada como zona de descanso y encuentro de los líderes y ministros, cuelga un mural que representa el famoso cuadro de Juan Genovés “El Abrazo”, de 1976, símbolo de la Transición.
Asimismo, los pabellones de IFEMA que albergan la cumbre se han engalanado con olivos y limoneros, como símbolos de la identidad española. Unos 50 ejemplares se distribuyen por los principales espacios que transitarán los jefes de estado y de gobierno, junto con los más de mil delegados y 2.000 periodistas. Al término de la cumbre algunos de estos ejemplares se trasplantarán a los Jardines de La Moncloa donde se creará un nuevo rincón en recuerdo a la cita que se celebra en Madrid estos días.