Con el impulso de la nueva marca de artesanía de Castilla-La Mancha 'Legado Artesano', la región continúa exponiendo al mundo las creaciones de los que llevan toda la vida dedicándose a ello. Por ello, la artesanía castellano-manchega ha participado en el 'Salone del Mobile' de Milán (Italia), uno de los eventos de diseño más importantes del mundo. Lo ha hecho a través de 'Arachne', impulsado por la Junta y la Consejería de Economía para integrar el diseño contemporáneo a las técnicas artesanales tradicionales. Allí han presentado 'Alcova', un proyecto que recrea un dormitorio antiguo del antiguo matadero de Porta Vittoria, en el que han participado un total de nueve artesanos de la región.
Uno de ellos es Luis Machí, que ha explicado a EL ESPAÑOL – EL DIGITAL CLM que ha participado con unas lámparas hechas en vidrio soplado. Para Luis, participar en este tipo de eventos supone "una oportunidad para todo el tejido artesano de la región. "Estar ahí supone subir un peldaño muy importante para un sector que ha estado siempre tocado".
Machí tiene su taller artesano en Albacete capital desde hace 20 años. Nació en Valencia, se mudó a Castilla-La Mancha y se fue a vivir 25 años a Cataluña. Después volvió y con sus creaciones se ha convertido en uno de los artesanos más exclusivos del mundo. "Estar en Albacete ha supuesto ser cabeza de ratón en vez de cola de león. En Barcelona no hubiese conseguido esto. Es algo que tengo que agradecer a esta tierra, por su entorno y circunstancias. En Castilla-La Mancha se pueden hacer cosas que no se podrían hacer en otros sitios".
Un proceso mágico
Luis Machí es uno de los pocos artesanos de todo el mundo que fabrica su propio vidrio. Partiendo de la arena consigue vidrio añadiendo productos químicos, a través de una fórmula en la que ha trabajado todo este tiempo. "Esta fórmula es un secreto porque me costó mucho conseguirla. Es algo de lo que estoy muy satisfecho porque el vidrio es de una calidad muy alta. Es un proceso que parece mágico".
Tras estudiar Bellas Artes se dio cuenta que su medio era más material y encontró en el vidrio el abanico de inquietudes que tenía. Desde entonces trabaja la técnica del soplado, "la técnica más interesante y mágica de trabajar con vidrio". "Mi técnica es la del vidrio veneciano o de murano y se sigue haciendo igual después de muchísimos siglos".
Las creaciones de Luis Machí son exclusivas y, tal y como ha contado, este mismo lunes se encuentra trabajando en unos cristales para unas lámparas de un hotel de Madrid. "Son para clientes que quieren lámparas exclusivas y de lujo".