La concejala de Sostenibilidad y Agenda 2030 de Ciudad Real, Mariana Boadella, ha presentado este miércoles la nueva campaña de concienciación ciudadana sobre limpieza de orines de los perros, dirigida a despertar el comportamiento responsable de los propietarios de perros.



En especial, ha asegurado la edil en la presentación en rueda de prensa, "a los que eluden sus responsabilidad de no limpiar las deyecciones de sus mascotas a pesar de las sanciones que existen".



El problema, según Boadella, "no es que orine un perro en una esquina, sino que a lo largo del día por ese lugar pasan muchos perros y eso se convierte en un problema evidente de limpieza y de deterioro del mobiliario urbano, que se oxida y hay que reponerlo con motivo de los orines".



Además, ha ampliado, "es una cuestión que afecta a las viviendas, a los negocios y a todos los que pasean por la calle, que al final tiene que ser limpiado por otros".



"Creemos que los propietarios de perros han de tomar parte activa en esto e igual que los padres nos responsabilizamos de lo que hacen nuestros hijos los propietarios de animales de compañía nos tenemos que responsabilizar de lo que hacen nuestros animales de compañía", ha reclamado.



Para contribuir a concienciar sobre esta responsabilidad, ha informado que el Ayuntamiento va a repartir botellas que contendrán agua con vinagre para rociar los orines y evitar así los malos olores.



Boadella ha recordado que en la Ordenanza de Limpieza se contempla la prohibición de que los perros orinen en fachadas, esquinas y en mobiliario urbano. "Sabemos que eso es inevitable y ésta es la oportunidad de que si ocurre eso, puedas limpiar lo que el perro ha dejado allí", ha subrayado.



Durante el pasado año el Ayuntamiento de Ciudad Real sancionó a 34 personas por excrementos caninos, frente a los 21 de 2018, y "el coste medio fue de 300 euros, aunque la normativa contempla sanciones hasta 750 euros", ha recordado la edil.