La ministra de Asuntos Exteriores, UE y Cooperación, Arancha González Laya, se ha sumado este miércoles a las expresiones de condena de una comparsa castellano-manchega de carnaval que escogió como tema el Holocausto, y de la que venimos informando en EL DIGITAL CLM.
"Horrorizada por la comparsa del carnaval en Campo de Criptana. Rechazo sin matices a cualquier banalización del Holocausto", ha escrito en su cuenta de Twitter, en la que ha remarcado que es "esencial seguir educando en la memoria". La ministra ha relatado que los organizadores han pedido disculpas a la Federación de Comunidades Judías de España.
Los promotores de la comparsa, una asociación cultural de Las Mesas (Cuenca) llamada El Chaparral, también ha pedido disculpas a públicas y ha cancelado su asistencia a todos los desfiles a los que tenía previsto asistir.
"El mensaje de consideración y respeto que queríamos transmitir posiblemente no se ha entendido como esperábamos o incluso no hemos sabido transmitirlo o no se ha hecho a través de los medios adecuados", ha reconocido en su cuenta de Instagram.
Por su parte, la Federación de Comunidades Judías de España, ha agradecido la intención de rendir homenaje a la memoria de las víctimas pero le ha transmitido a la asociación "que dicha conmemoración requiere de mayor sensibilidad para no banalizar el mal", según ha escrito en Twitter.
La asociación había avanzado ya en enero que su intención era homenajear a las víctimas del Holocausto y recordar "uno de los hechos más deshonrosos ocurridos en la historia de la humanidad" pero su montaje, con personas disfrazadas de oficiales nazis y de judíos prisioneros desfilando al son de música disco, recibió un aluvión de críticas en las redes sociales.
También el portavoz de la Embajada de Israel en España, Yoav Katz, condenó en Twitter "la vil y repugnante representación banalizando el Holocausto, según hemos publicado en EL DIGITAL.
La polémica sobre esta comparsa llega solo unos días después de que en el carnaval de la ciudad belga de Aalst desfilase un grupo disfrazado de oficiales nazis y fuentes diplomáticas israelíes temen que comience en Europa una tendencia de burlarse del Holocausto en los carnavales.