Las multas en Ciudad Real capital por saltarse el estado de alarma ascendían esta mañana a once, pero se podrían incrementar en función de los controles de movilidad que ha comenzado a realizar la Policía Local.

Los agentes de la Policía están controlando tanto a vehículos como a peatones para asegurar que se están llevando a cabo correctamente las medidas para evitar la propagación del Covid-19.

Con la entrada en vigor del Real-Decreto se establecen unas limitaciones para moverse por la ciudad, a pie o en vehículos, pero hay excepciones, según ha informado el Ayuntamiento en nota de prensa.

El jefe de la Policía Local de Ciudad Real, Fernando Díaz Rolando, ha asegurado que se está comprobando "que los que están circulando o andando están autorizados, y pueden demostrar que tienen esa autorización".

Para comprobar que la gente no hace un uso desmedido, la Policía Local comprueba las situaciones personales, realizando unas actas de control, sobre las que se realizan indagaciones: si va a realizar compra en un sitio muy alejado de donde vive, si ya se le ha identificado hace un rato en otro sitio realizando la compra, o va paseando a una mascota en un lugar muy distanciado de su domicilio.

"Estas cuestiones las hacemos constar en el acta de control, y si se está incumpliendo la normativa, será suficiente para tramitar un expediente contra la Ley de Seguridad Ciudadana por desobedecer las ordenes de la autoridad conveniente", ha asegurado el jefe de la Policía.

En la instrucción será cuando se valorará la gravedad de la acción. Las sanciones podrían ir desde los 300 euros a los 3.000 en función de la gravedad de la conducta, que podría llegar a ser un delito de desobediencia grave.

Precisamente, Díaz Rolando ha desvelado que esta mañana se ha tenido que denunciar a una persona que estaba paseando con un perro en la Vía Verde, a dos kilómetros de su casa. "Eso es un abuso. Está multado con unos 300 euros", ha dicho.