El municipio de Bolaños de Calatrava (Ciudad Real) vive con "resignación", pero con "cierta calma" el confinamiento decretado por Sanidad ante el aumento de casos de COVID-19 en los últimos días, que la han convertido en la segunda localidad de Castilla-La Mancha en aplicar estas medidas más restrictivas.

Así lo ha dicho el alcalde de este municipio, Miguel Ángel Valverde, en declaraciones a Efe este viernes, quien ha explicado que la situación en el municipio es de tranquilidad, pese a que entre los vecinos existe cierta inquietud por la situación de la pandemia.

Este primer día de confinamiento, ha comentado el regidor, está siendo especialmente intenso de trabajo para las autoridades municipales para tratar de implementar la medidas fijadas por Sanidad.

Valverde ha explicado que de momento aún la Guardia Civil no ha procedido al cierre de las carreteras del municipio a expensas de que llegue la resolución judicial que avale la decisión de Sanidad.

En cualquier caso, ha reconocido que eso se puede producir en las próximas horas, por lo que ya se ha diseñado un plan para cerrar todos los accesos y dejar tan sólo dos puntos de entrada al municipio, uno por la carretera que une Almagro con Bolaños, y otro por la carretera que une Bolaños con Manzanares.

El Ayuntamiento, ha dicho Valverde, está también ha trabajado en implementar un línea telefónica de atención al público que será atendida por cuatro personas para dar la mayor información posible a aquellos vecinos que están llamando para conocer qué implica esta medida y cuáles son las cosas que les está permitido hacer o no.

Además, ha comentado, la Policía Local se ha encargado durante todo este viernes de recorrer los bares del municipio para comunicar a sus dueños que esta resolución introduce una "limitación extra" a las medidas especiales que había en vigor antes, que no es otra que "no se puede estar en el interior de los bares".

Valverde ha querido trasladar a todos los vecinos de Bolaños un mensaje de tranquilidad y ha asegurado que, aunque es cierto que a nadie le gusta que "el pueblo esté viviendo esta situación, no es ajeno a lo que está sucediendo en otros lugares".

El alcalde ha recordado que en Bolaños, con 11.934 vecinos censados, se han hecho "muchas pruebas PCR" al haber "muchos contactos de contagiados" y en ese rastreo de contagios con prueba, se están encontrando "muchos más casos", en concreto, ha señalado, eran 180 aunque esta cantidad que podría aumentar, dado que este jueves, ha dicho, "se realizaron numerosos test".

Afortunadamente la mayoría de estos casos están siendo asintomáticos y, hasta ahora, con incidencias leves, aunque alguna persona ha tenido que ser hospitalizada.

El alcalde también ha hecho un llamamiento a que no se caiga en el error de estigmatizar a nadie, ni a ningún colectivo en concreto por esta situación, dado que, ha recordado, los dos brotes principales que surgieron en el municipio provenían uno de trabajadores temporeros y otro de un núcleo familiar.

Los nuevos contagios, ha advertido Valverde, "en ningún caso tienen relación con estos brotes", por lo que no se puede estigmatizar a ningún colectivo de personas, como tampoco se puede estigmatizar a los jóvenes.

En este sentido, también ha lamentado los mensajes "grandilocuentes" que en algún momento se han lanzado desde el Gobierno asegurando que "se había podido con el virus y que era el momento de recuperar la normalidad en un ejercicio más de voluntad que, seguramente cómo se está demostrando, de realidad".

"Aunque todos somos responsables, yo no comparto por ello que se pueda culpar a los ciudadanos de manera directa, aunque es cierto que todos, individualmente somos responsables", ha reflexionado el alcalde bolañego.

Aún así, ha dicho, revertir esta situación depende de todos, de que todos los ciudadanos sean responsables y de que sigan manteniendo las medidas y prevenciones conocidas, porque "solo así se evitan más contagios".