La Audiencia Provincial de Ciudad Real ha condenado a tres años y medio de prisión al acusado de quedarse con el dinero de un cliente para la compra de unos inmuebles en Poblete en abril de 2005.
La sentencia, a la que ha tenido acceso Europa Press, señala que lo han encontrado culpable de un delito continuado de apropiación indebida con el agravante haberse apropiado de más de 50.000 euros, en concurso ideal con un delito de falsedad en documento privado, concurriendo la atenuante de dilaciones indebidas.
Por otro lado se le absuelve de los delitos de estafa procesal en grado de tentativa y de falsedad en documentos privado, por los que también había sido acusado.
La Sala ha encontrado probado que el acusado era abogado asesor de J.M.M., representante legal de una sociedad mercantil, y que este último hizo entrega de diversas cantidades de dinero cuyo fin era la adquisición de unos solares en la localidad de Poblete, sumando un total de 267.300 euros, de los cuales, el acusado sólo destinó a los fines para los que le fueron entregados 90.000 euros.
Además, y como parte del precio se pactó y pagó en negro, se entregó en metálico a cada comprador en mismo día en que se firmaron las escrituras 25.500 euros.
El acusado no destinó el resto del dinero recibido, 75.300 euros, a los fines para los que le fue entregado incorporándolo a su patrimonio y, para aparentar la rectitud de su proceder, como debían adquirirse otros dos solares colindantes, remitió a J.M.M. un contrato privado de compraventa que él mismo había confeccionado y firmado, por el cual se compraba a M.S.A. una finca urbana sita en Poblete, por un precio total de 180.000 euros.
También un recibí, confeccionado y firmado también por él, según el cual la compradora habría recibido un primer pago de 90.000 euros, siendo la realidad que M.S.A. no era dueña de dicho solar, pues es propiedad de A.M. y de M.R.D. quienes nunca lo habían puesto a la venta ni tuvieron relación alguna con el acusado, como tampoco se hizo entrega de suma alguna a la supuesta vendedora.
Por otro lado, también ha encontrado probado que el acusado promovió un procedimiento de Jura de Cuentas en reclamación de los honorarios devengados presentando una declaración jurada en el sentido de que los honorarios a los que se refería su demanda habían sido reclamados y no habían sido satisfechos, como así había sucedido realmente, firmada F.R.C. y de U.A.M., ex empleados de su despacho, que no había sido hecha por ellos.
Además de la pena de prisión, el acusado deberá indemnizar al demandante con la cantidad de 75.300 euros más el interés legal.