El 27 de marzo se celebra el Día Mundial del Teatro y, como cada año, la concejalía de Cultura de Daimiel ha programado un abanico de actividades para conmemorar dicha efeméride. Como ha manifestado la edil responsable de esta área, Lourdes Rodríguez de Guzmán, la programación se ha pensado con el objetivo de “favorecer el acercamiento a la cultura y el teatro en un contexto en el que se pretende manifestar el apoyo total a la cultura y reivindicar los teatros como espacios 100 % seguros”.
Los actos arrancarán el día 25 de marzo, con un programa especial dedicado al teatro que se podrá escuchar en Radio Daimiel de 9:30 a 10:00 horas. No obstante, el plato fuerte llegará el viernes, 26 de marzo a partir de las 20:00 horas, con la representación de una adaptación de ‘El Lazarillo de Tormes’.Bajo la dirección de Lluís Elías, el actor Antonio Campos será el único encargado de la parte actoral con la única compañía de José Luis Montón a la guitarra. Antes del inicio de la obra, se procederá a la lectura del manifiesto del Día Mundial del Teatro que en esta ocasión ha tenido a la actriz Helen Mirrer como protagonista.
Las entradas pueden comprarse ya a través de la plataforma de Globalentradas o en taquilla, el día de la obra, dos horas antes del inicio a un precio de 8 euros.
La agenda se completará con diferentes entrevistas en Radio Daimiel como las que ya se han realizado a los actores Juanjo Artero o Jon Plazaola, o la que ocurrirá próximamente con Antonio Campos. También se está planificación un encuentro virtual con Campos y los alumnos de los institutos de la localidad una vez pasada la Semana Santa.
Sinopsis de ‘El Lazarillo de Tormes’
Nunca antes un clásico había tenido la oportunidad de que lo acompañase la poderosa guitarra cómplice de José Luis Montón, acordes que se unen a la única voz del Lazarillo de Tormes que se representa a través de Antonio Campos escenificando la clase baja y vagabunda de una época. Un antihéroe pregonero y astuto, un pícaro que pasando de amo en amo sufría la hambruna del pobre Siglo de Oro.
Afortunadamente y a pesar de todo, una vez pudo conseguir una vida más llevadera, es en ese momento de su vida donde Lázaro resume su visión de la realidad, y se presenta como un insignificante "don nadie". Se manifiestan ecos jondos donde el Siglo de Oro y la actualidad se dan la mano a través del humor y la ironía que rezuma del propio texto acentuándolo con toques de bulerías, fandangos o soleares que tienen su propia voz entre las cuerdas flamencas y los dedos de José Luis Montón.