Ecologistas en Acción Ciudad Real ha denunciando ante la Fiscalía de Medio Ambiente la puesta en cultivo de la laguna de La Nava que se encuentra en el entorno del área de influencia del Parque Nacional de Las Tablas de Daimiel, en la provincia de Ciudad Real.
En la denuncia, a la que ha tenido acceso este viernes Efe, la organización ecologista ha pedido que la fiscalía investigue si puede ser constitutivo de un delito contra el medio ambiente por parte de los propietarios y si ha existido prevaricación administrativa por parte de la dirección del Parque Nacional de Las Tablas de Daimiel, de los responsables de la Consejería de Desarrollo Sostenible y la Confederación Hidrográfica del Guadiana, por permitir el cultivo en la laguna.
Ecologistas ha explicado que la laguna de La Nava forma parte de la zona de Influencia del Parque Nacional, por lo que cualquier actuación que pueda modificar o reducir su superficie encharcada o deteriorar la calidad de sus aguas necesita del preceptivo informe del patronato del Parque.
Además, la laguna está doblemente incluida en el Catálogo de Hábitat y Elementos Geomorfológicos de Protección Especial en Castilla-La Mancha: en la categoría de tipos de hábitats naturales escasos, limitados, vulnerables o de importancia para la biodiversidad, y en la categoría de tipos de elementos geológicos o geomorfológicos de interés especial.
Esto implica, según la organización ecologista, la prohibición de destruir o realizar acciones que supongan una alteración negativa de los hábitats o elementos geomorfológicos de protección especial.
Todos estas limitaciones para la puesta en cultivo de la laguna ya fueron tratadas en 2015 en una reunión del patronato del Parque Nacional de Las Tablas de Daimiel, que informó favorablemente el proyecto de ampliación del perímetro de regadío en La Nava.
Además, en 2016 la Viceconsejería de Medio Ambiente formuló un informe favorable de impacto ambiental del proyecto autorizando la puesta en regadío de la totalidad de la laguna, y en 2017 Ecologistas en Acción informó al patronato de la situación de la laguna de la Nava y solicitó a la Confederación del Guadiana paralizar el proyecto y a la Viceconsejería de Medio Ambiente anular su resolución por atentar contra la zona de influencia del Parque Nacional de Las Tablas de Daimiel y contra el hábitat y el elemento geomorfológico protegido.
Ya en 2021, en otra reunión del patronato del Parque Nacional de Las Tablas de Daimiel, se informó negativamente una solicitud de instalación fotovoltaica para riego solicitada por los propietarios de la laguna, ha explicado Ecologistas, que ha agregado que, paradójicamente, ese informe negativo se sustentó en que es una laguna considerada como un elemento geomorfológico de interés especial comunitario y hábitat de interés por ser humedal estacional.
El expediente de instalación de placas fotovoltaicas también contó con el informe negativo vinculante del Servicio de Medio Natural de Ciudad Real, de la Consejería de Desarrollo Sostenible, pero en diciembre de 2021 se informó en otra reunión del patronato que el propietario de la laguna de la Nava había instalado pistachos de riego y construido dos instalaciones fotovoltaicas a pesar de los informes negativos.