Absuelven a un hombre acusado de abusar de una mujer con discapacidad en Ciudad Real
Según la sentencia, faltan elementos de corroboración periférica objetiva.
6 julio, 2022 14:31La Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Ciudad Real ha absuelto a J.M.M.N., acusado de un delito de abuso sexual a una mujer que tenía reconocida una discapacidad del 65 por ciento, delito por el que la Fiscalía pedía para él una pena de nueve años de prisión.
Según la sentencia, recogida por Europa Perss, se procede a la absolución ante "la falta de elementos de corroboración periférica objetiva, de fácil y posible obtención, y por otro, que los obtenidos no tienen tal carácter, así como que la declaración, pese a su persistencia, a juicio de este Tribunal, no es firme y consistente en todos sus extremos, sino que presenta alguna mínima fisura".
"La conclusión a la que llega esta Sala es que la prueba practicada en su conjunto es insuficiente para generar la exigible certeza más allá de toda duda razonable lo que nos lleva el principio 'in dubio pro reo' al no haberse alcanzado la convicción de certidumbre necesaria respecto a los hechos objeto de acusación para efectuar un pronunciamiento condenatorio, razones todas ellas que nos conducen a absolver al acusado".
Buena relación con la víctima
El Ministerio Fiscal sostenía que el día de los hechos, el acusado, que mantenía una buena relación de vecindad y familiar con la víctima al residir ambos en la misma localidad y estar emparentado el acusado con la familia política de la hermana de esta mujer, abordó a la víctima.
Según el relato del fiscal, fue el 10 de agosto de 2019 a las 19.30 horas cuando se acercó a la víctima mientras esta se encontraba recogiendo moras en las afueras de la localidad y, siendo conocedor de la clara situación de inferioridad en que se encontraba respecto de él, así como de su vulnerabilidad, que no le permitía detectar situaciones de riesgo, aprovechó para ganarse su confianza ofreciéndose a llevarla hasta un sitio en el que, según él, había muchas moras y que se encontraba muy próximo al lugar donde estaban.
Una vez allí, el procesado comenzó a ofrecer moras a la víctima, colocándoselas en las manos hasta que, en un momento dado, con ánimo de satisfacer sus impulsos libidinosos, introdujo su mano por debajo de los pantalones cortos que vestía, hasta llegar a tocar sus glúteos, a pesar de que la mujer le manifestaba reiteradamente su negativa e intentaba apartarse del acusado, consiguiendo finalmente zafarse, subir a su bicicleta y marcharse del lugar.