El Gobierno de Castilla-La Mancha y la Diputación de Ciudad Real garantizan el programa de Apoyo Nutricional para personas en su entorno, que ya beneficia a 1.000 personas mayores en 61 municipios de la provincia.
Así lo ha manifestado la consejera de Bienestar Social, Bárbara García Torijano, durante el encuentro que ha mantenido junto al presidente de la Diputación de Ciudad Real, José Manuel Caballero, con los alcaldes y alcaldesas de los 61 municipios de la provincia en los que ya se está desarrollando este Proyecto de Apoyo Nutricional para las personas en su entorno. En este acto han estado acompañados de la delegada de la Junta en Ciudad Real, Carmen Teresa Olmedo; el director general de Acción Social, Francisco José Armenta, y la delegada de Bienestar Social en la provincia, Manuela González Horcajo.
En este sentido, la consejera de Bienestar Social ha destacado la importancia de este proyecto “que se centra en la persona y en proyectos que previenen otras situaciones sobrevenidas que por la edad a todos nos pueden llegar, y que garantiza que nuestros mayores puedan estar mejor atendidos, muy bien cuidados y, sobre todo, puedan decidir quedarse en sus hogares si así lo desean”.
Así, García Torijano ha destacado la importancia de la colaboración institucional, en este caso con las diputaciones y ayuntamientos, y la necesidad de que “estemos unidos independientemente del color político y que tengamos claro cuáles son nuestros objetivos y, sobre todo, coordinados” porque “cuando un proyecto sale de la mano de los ayuntamientos, Junta y diputaciones siempre es un éxito, nunca falla”.
Financiación
En cuanto a la financiación y puesta en marcha de este proyecto la titular de Bienestar Social ha indicado que algunas provincias y diputaciones provinciales, como es el caso de la de Ciudad Real, ya ofrecían este servicio a sus ciudadanos, “pero desde la firma por parte del presidente de ese convenio de colaboración, este novedoso servicio se está implantando en las cinco provincias y se va a ver reforzado, para lo que el Gobierno regional va a destinar entre 2022 y 2023, 8,6 millones de euros, lo que supone 1,7 millones de euros aproximadamente por cada Diputación y con el objetivo de beneficiar a más de 3.500 personas”.
Se trata de una iniciativa que tiene como objetivo primordial el impulso de un nuevo modelo de atención integral de la persona, garantizando la continuidad de los cuidados, favoreciendo el desarrollo rural reforzando la atención domiciliaria desde una nueva perspectiva; y “complementando los cuidados en el domicilio a través de los servicios de proximidad, tales como la ayuda a domicilio o la Teleasistencia, con un servicio de apoyo nutricional a través de reparto de comida a domicilio”.
Las personas que se van a beneficiar de este servicio son personas en situación de dependencia o que viven en soledad, personas con carencias socioeconómicas o personas en situación de vulnerabilidad social.
Finalmente, la consejera ha destacado también que este programa conlleva la formación de los profesionales del Servicio de Ayuda a Domicilio, “con una formación avanzada, más amplia y profesionalizada que les va a ofrecer la posibilidad de prevenir otro tipo de situaciones que se puedan dar en las personas usuarias del servicio”.