Dos nuevas joyas históricas de la provincia de Ciudad Real, actualmente en proceso de rehabilitación, pasarán en el futuro a formar parte de la Red de Hospederías de Castilla-La Mancha, que poco a poco va creciendo y consolidándose como un circuito turístico y gastronómico de referencia en la región. Se trata del Convento de Santa Clara, en Alcázar de San Juan, y la Almazara del Marqués, en Viso del Marqués, dos edificios patrimoniales que están recibiendo importantes inversiones públicas para su recuperación.
El Consejo de Gobierno de Castilla-La Mancha acaba de aprobar una inversión de 840.000 euros para avanzar en estos dos emblemáticos proyectos de la provincia de Ciudad Real, a razón de 420.000 euros para cada uno de ellos, tal como ha confirmado el Gobierno regional con el objetivo de proceder después a su incorporación a la citada Red de Hospederías, de la que ya forman parte seis emblemáticos destinos que arrancaron en enero de 2019, tal como viene informando EL ESPAÑOL EL DIGITAL CLM.
“Acabamos el año con decisiones muy importantes para nuestra mejora como destino turístico, destinando 840.000 euros a dos importantes proyectos en la provincia de Ciudad Real”, ha señalado la consejera de Economía, Empresas y Empleo, Patricia Franco, que ha detallado que la primera de esas inversiones supone 420.000 euros para la primera fase de las obras en el Convento de Santa Clara, en Alcázar, “para iniciar el proyecto para su incorporación a la Red de Hospederías de la región”.
De ensueño
La segunda de esas inversiones irá a parar a Viso del Marqués, “que, tras las inversiones que realizamos junto con la Diputación de Ciudad Real de 800.000 euros a través de Expresiones de Interés, ahora dotamos 420.000 euros para finalizar obras de adaptación y mejora de la hospedería Almazara, que también se incorporará a la Red de Hospederías de Castilla-La Mancha”.
Una localidad, Viso del Marqués, que, como ha anunciado Patricia Franco, acogerá en los primeros días del próximo año la presentación de la propuesta con la que Castilla-La Mancha acudirá a FITUR 2024 en este mes de enero, y que será “de ensueño para todos”.
La primera de las inversiones, dirigida al Ayuntamiento de Alcázar, tiene como objetivo apoyar la primera fase de rehabilitación del antiguo Convento de Santa Clara, en Alcázar de San Juan, un icono histórico de la localidad que se está recuperando para su uso turístico con una zona visitable y para su uso como establecimiento hotelero, que se adscribirá en el futuro a la Red de Hospederías de Castilla-La Mancha.
La inversión, en este caso, es de 420.000 euros, y está dirigida a apoyar la primera fase de rehabilitación de este edificio, con la consolidación de elementos originales y una intervención global en revestimientos, iluminación, mobiliario y elementos singulares, además de para las instalaciones necesarias en materia de electricidad y climatización, con actuaciones que se llevarán a cabo en todos los espacios del convento.
Este proyecto cuenta, además, con una segunda y una tercera fase para su rehabilitación integral, para completar su acondicionamiento previo a la adhesión a la Red de Hospederías de la región.
Almazara
Por otro lado, se realizará una inversión directa de cerca de 420.000 euros dirigidos al Ayuntamiento de Viso del Marqués, para apoyar las obras de acondicionamiento de la segunda fase de la hospedería Almazara de la localidad.
Este proyecto ya se ha completado en su primera fase, con la adecuación de las habitaciones, y en esta segunda fase se van a llevar a cabo las tareas de mejora y acondicionamientos de aseos y salones, con especial atención al revestimiento de los techos y a la renovación de las instalaciones de electricidad y fontanería.
En la tercera y definitiva fase del proyecto, posterior a la que se va a acometer con apoyo del Gobierno regional, se llevará a cabo el acondicionamiento de la cocina y de los exteriores de un edificio que era una antigua almazara construida en la segunda mitad del siglo XVIII, de ladrillo y tapial, que fue propiedad del Marqués de Santa Cruz, don Álvaro de Bazán, y se construyó para atender las necesidades de la producción aceitera de la época.