El presidente de la Diputación Provincial de Cuenca, Benjamín Prieto, se ha desplazado este sábado hasta la capital alicantina con el fin de recibir el reconocimiento de la Casa de Cuenca en Alicante-Los Amigos de las Casas Colgadas como Conquense del Año 2018 por “su trabajo en defensa del patrimonio cultural de la provincia de Cuenca, así como su desarrollo y prosperidad”. Acto en el que ha estado acompañado del teniente de alcalde de Alicante y vicepresidente de la Diputación alicantina, Carlos Castillo; Eduardo Finol, presidente de la Federación de Casas Regionales; Fernando Navarro, presidente de la Asociación Cultural El Quijote y Casa de Castilla-La Mancha en Alicante; el presidente de la Casa de Cuenca en Alicante, Antonio Buendía; y el pregonero Fernando García Aragón.

Un nombramiento que ha recibido con orgullo y satisfacción, puesto que, según ha dicho, es resultado directo de su firme compromiso con el patrimonio de la provincia al que atribuye un efecto dinamizador en la economía y una línea estratégica para avanzar hacia un futuro mejor de nuestra tierra.

No es de extrañar, en consecuencia, que para Prieto este nombramiento haya supuesto todo un acicate e impulso para continuar trabajando, con más ahínco si cabe, en esta línea, que en los últimos ocho años ha conllevado más de ochenta intervenciones en la rehabilitación y puesta en valor del patrimonio conquense con una inversión superior a los veinte millones de euros. Una apuesta, a su juicio, que busca generar oportunidades de riqueza y empleo en torno a un sector tan estratégico como el turismo con el fin de afianzar la población en el territorio y contribuir así a luchar contra la despoblación.

Pero si importante es este reconocimiento no lo es menos, tal y como ha asegurado, el hecho de que esta comunidad originaria de conquenses vea también en el patrimonio una gran oportunidad para nuestro territorio. Una tierra de la que, según ha remarcado, nunca se han desligado y, como muestra, bien pueden valer estos actos conmemorativos de la festividad de San Julián, Patrón de Cuenca, en los que se ha enmarcado este nombramiento de Conquense del Año.

Es por ello que Prieto ha querido agradecer a los integrantes de la Casa de Cuenca en Alicante-Los Amigos de las Casas Colgadas su trabajo y dedicación para valorar su tierra, desde el patrimonio hasta sus tradiciones, pasando por sus productos agroalimentarios, convirtiéndose en los mejores embajadores de la provincia difundiendo su gran potencial en cuanto tienen la mínima oportunidad.

De ahí que les haya animado a continuar estrechando lazos con su tierra natal, a no perder ese nexo de unión con sus orígenes y a difundir y transmitir esa identidad conquense a sus hijos con el fin de que Cuenca siempre esté presente en sus corazones por muy lejos que estén de ella. En este sentido, Prieto ha dejado claro que tienen en él y en la Diputación al mejor aliado, porque, en su opinión, las comunidades originarias juegan un papel fundamental fuera de nuestra provincia, de ahí el constante apoyo de la institución provincial tanto a las Casas de Cuenca como a las Casas de Castilla-La Mancha diseminadas a lo largo y ancho de la geografía nacional.