Las obras de rehabilitación del alfar de Pedro Mercedes, en Cuenca capital, tienen un plazo de ejecución de un año y un coste de 611.000 euros, y servirán para convertir el edificio, del siglo XVI, en museo y taller, pero con espacios para uso vecinal.
Así lo ha avanzado este lunes en declaraciones a los medios de comunicación el alcalde de Cuenca, Darío Dolz, que ha visitado las obras, que comenzaron la semana pasada, junto al vicepresidente del Gobierno de Castilla-La Mancha, José Luis Martínez Guijarro, y el hijo de Pedro Mercedes, Tomás Mercedes.
Dolz ha subrayado que el "ansiado" inicio de la actuación en el alfar, que ejecuta el Consorcio Ciudad de Cuenca, servirá para dotar también de espacios para uso vecinal al barrio de San Antón, a cuyos pies se encuentra el antiguo taller del alfarero.
Por su parte, el hijo de Pedro Mercedes ha mostrado la satisfacción de su familia porque hayan comenzado al fin las obras y ha instado a las administraciones a que el alfar se convierta en un "espacio vivo".
Asimismo, Mercedes ha recordado que la Junta de Comunidades tiene, desde hace casi 20 años, más de 200 obras de su padre, y también el Ayuntamiento tiene muchas piezas, entre ellas las placas destinadas al edificio del Mercado Municipal.
Ha subrayado que es "más que suficiente" para organizar un museo del alfarero, pero en cualquier caso ha indicado que la familia está abierta a ceder o prestar más obra si se considera necesario.
Por su parte, la arquitecto responsable del proyecto, Patricia Huerta, ha explicado a los periodistas que han diseñado la rehabilitación en colaboración con la familia, para "conocer exactamente las necesidades".
También el arqueólogo Santiago Domínguez ha resaltado que el edificio, del siglo XVI, es "un espacio arqueológico, etnográfico y artístico en el que se puede contar la vida de Pedro Mercedes y cómo convirtió la alfarería tradicional en artística".