Castilla-La Mancha es la segunda comunidad autónoma con mayor porcentaje de población que ha tenido contacto con la COVID-19 desde que se inició la pandemia, que llega a un 10,8 % de sus habitantes, según el estudio de seroprevalencia del Ministerio de Sanidad y el Instituto de Salud Carlos III (ISCIII).
Los datos preliminares de este estudio que están llevando a cabo estos dos departamentos, indican que Castilla-La Mancha solo está por detrás de la Comunidad de Madrid (11,3 % de la población) en porcentaje de contacto con el coronavirus, y además ambas comunidades son las únicas que superan el porcentaje del 10 %, que se queda en el 7,2 % en Castilla y León, que es la tercera con mayor número de contactos.
Además, Cuenca y Albacete están entre las cinco provincias con mayor porcentaje de población que ha tenido contacto con el coronavirus, con un porcentaje del 13,5 % en la provincia conquense y del 11,6 % en la albaceteña.
También están por encima del 10 % de contagios las provincias de Ciudad Real (11,1 %) y Guadalajara (10, 9 %), mientras que la de Toledo tiene el menor porcentaje de población que ha tenido contacto con el coronavirus de la región, con un 9,3 %.
Los primeros resultados del estudio muestran que el 5 % de los españoles ha estado en contacto con el virus causante de la covid-19, sin diferencias apreciables por edad ni por sexo, pero sí geográficas: las tasas llegan al 14,2 % en Soria, al 13,5 % en Cuenca, al 12,6 % en Ávila, al 11,6 % en Albacete y al 11,3 % en Madrid.
En cambio, hay varias provincias por debajo del 2 %: Las Palmas (1,4 %), Murcia (1,4 %), Huelva (1,5 %), Tarragona (1,6 %), Cádiz (1,7 %), Almería (1,8 %), La Coruña (1,8 %) y Asturias (1,8 %), datos a los que se suman los de Ceuta (1,1 %) y Melilla (1,9 %).
Así se desprende de la primera oleada del macroestudio que arrancó el pasado 27 de abril en más de 36.000 hogares para medir el nivel de inmunidad de los españoles frente al virus y que están presentando en rueda de prensa los ministros de Sanidad, Salvador Illa, y Ciencia, Pedro Duque, además de los directores del mismo.
Illa ha explicado que no hay inmunidad de rebaño -que requiere alrededor de un 60 % de población con anticuerpos- según estos datos preliminares, y también que sobre esta hipótesis se elaboró el plan de desescalada.
De la misma forma, la macroencuesta reafirma a los expertos "en todos los criterios de prudencia" de los que han venido avisando y sobre los que han elaborado el plan de desescalada.
En ello ha incidido la directora del Centro Nacional de Epidemiología, Marina Pollán: "La prevalencia que estamos encontrando está muy lejos de permitirnos afirmar que hay inmunidad de grupo". "Podría haber un repunte de la infección si se multiplicasen los contactos con las personas que son portadoras del virus. No sabemos qué va a pasar", ha añadido.
"Curiosamente" ese 5 % de prevalencia es precisamente la que se esperaban los técnicos sanitarios cuando empezaron a realizar la encuesta, ha explicado Pollán, que ha valorado la participación de casi el 75 % de la muestra, algo "muy poco habitual en estudios poblaciones". "El 89 % de estos participantes se dejaron pinchar para tener una muestra de sangre y poder tener un test de laboratorio, que es mucho más específico y fiable", ha señalado.
Otra de las conclusiones extraídas es que "hay una gran variabilidad geográfica", ya que las zonas donde la prevalencia es mayor, "tienen una zona que es cinco veces mayor" a aquellas zonas que tienen la más baja.
En Ceuta, Murcia, Melilla, Asturias y Canarias es inferior al 2 %, mientras que Castilla-La Mancha y Madrid superan el 10 %. En los mapas provinciales, destaca la agrupación central de provincias con prevalencias iguales o próximas al 10 % en el entorno de Madrid.
Por el contrario, no se notan "diferencias entre hombres y mujeres, tampoco entre grupos de edad".
Así, el estudio arroja que la de los trabajadores esenciales es similar al resto de grupos, un 5,3 %, pero es "ligeramente inferior" en niños.
Lo que se desprende de los resultados del estudio en el que han participado 268 menores de 1 año, 1.693 menores de 5 años y 2.857 entre 5 años y 9 años; para el primer grupo, la prevalencia es del 1,1 %; en el segundo, del 2,2%; y en el tercero, del 3 %. "A lo mejor también han estado más protegidos", ha apreciado Pollán.
Asimismo, también cambia a medida que aumentan los síntomas: para las personas que tienen entre tres y cinco compatibles con el virus, es del 8 %; con más de 5, se eleva al 14,7%, aunque "ha llamado la atención" que en los que han sufrido una pérdida súbita del olfato se dispara al 43 %.