La Diputación de Cuenca ha llevado a cabo obras de adecuación y rehabilitación en la CUV-9142 que une las localidades de Valdemoro de la Sierra y Campillos Sierra. Esta actuación ha contado con una inversión definitiva de 370.000 euros que han permitido realizar una mejora estructural del firme en los 8 kilómetros de longitud que presentaban un deterioro muy importante.
El presidente de la Diputación, Álvaro Martínez Chana, ha sido el encargado de recepcionar estas obras acompañado del vicepresidente provincial, Francisco López, y el alcalde de Valdemoro-Sierra, Javier Tello, y del teniente alcalde de Campillos Sierra, Pedro Soriano, según ha informado la Diputación en nota de prensa.
El máximo responsable de la institución provincial ha comprobado el buen estado en el que ha quedado esta infraestructura y ha puesto en valor que haya sido una empresa conquense, que genera trabajo en la provincia, la que haya llevado a cabo esta obra.
En este punto, Martínez Chana ha puesto en valor la importancia del sector público como dinamizador de la economía, sobretodo en momentos complicados como el actual, ha señalado que "de nada sirve tener dinero en las cuentas públicas, si los pueblos tienen necesidades imperiosas".
El actual ejecutivo está llevando a cabo un importante esfuerzo inversor en materia de fomento para mejorar la red provincial de carreteras a las que ha destinado más de 5 millones de euros en el último año y acondicionados más de 65 kilómetros. El presidente ha mostrado su compromiso para seguir trabajando en esta línea con el fin mejorar la seguridad de las vías conquenses.
CUV-9142
El tramo de la carretera CUV-9142 sobre el que se ha actuado está situado entre la población de Valdemoro de la Sierra, y el cruce de la carretera CM-2106, en las cercanías de la población de Campillos Sierra. Las actuaciones sobre el firme han consistido en sanear las zonas del firme roto y deformado mediante la excavación en saneo de 40 cm de profundidad y reposición con zahorra artificial en un espesor de 35 cm.
También se ha reperfilizado y regulado con mezcla bituminosa en caliente algunas zonas puntuales con el pavimento más deformado. Por último, se ha extendido una capa de rodadura de 5 centímetros de espesor en los 8 kilómetros y un ancho de 5,25 metros de espesor. Además, se ha llevado a cabo una limpieza de cuentas, balizamiento y reposición de las señales verticales y horizontales de esta carretera.