La Casa del Corregidor del Casco Antiguo de Cuenca ha reabierto este miércoles sus puertas tras 12 años de rehabilitación con 5 proyectos diferentes de un espacio que a partir de ahora albergará la sede del Consorcio de la ciudad, parte del archivo municipal, museos dedicados a las antiguas cárceles de la Edad Media y, además, también albergará la oficina municipal de turismo.

Todo ello en un espacio de en torno 3.000 metros cuadrados divididos en un total de 8 plantas, de las que tres asoman a la calle Alfonso VIII y 5 a la calle Matadero Viejo, de las que habrá 1.900 metros cuadrados útiles.

Un edificio que tras esta rehabilitación se ha convertido en el segundo más importante de la ciudad tras el edificio del Ayuntamiento y que cuenta con en torno 470 años de historia y que ha sido cárcel, escuela, casa del Corregidor, sede del gobierno civil de Cuenca e incluso casa del alcalde.

La obra de rehabilitación comenzó en el año 2009 con el primer de los proyectos. No fue hasta 2018 cuando se puso sobre la mesa el quinto y último proyecto, del arquitecto Enrique García, que ha dado la forma y los espacios que desde hoy ya se pueden visitar.

Además, en este espacio se ha hallado multitud de documentos judiciales, ya que el edificio también acogió juzgados, estancias que habían sido tapiadas con el paso de lis años e incluso documentación sobre bombardeos acaecidos en Cuenca durante la guerra civil.

Consorcio

Durante las intervenciones, el presidente de la Diputación de Cuenca, Álvaro Martínez Chana, ha puesto en valor el papel de todos los técnicos, arquitectos y directores de obras que han pasado por el espacio a lo largo de los últimos años y ha destacado el papel del Consorcio.

Una entidad que tiene que servir como "un elemento útil" y con el que se tiene que trabajar "de forma denodada" para restaurar, poner en valor y dar vida al Casco Antiguo.

A juicio de Martínez Chana, el Consorcio de Cuenca es "un privilegio", ya que bajo este paraguas se engloban todas las administraciones, desde el Gobierno de España hasta la Diputación, la Junta de Comunidades y el Ayuntamiento de Cuenca.

Por todo ello, ha brindado por "la magnífica obra" que se ha llevado acabo para que el Consorcio de la ciudad de Cuenca "siga muchos años más". Además, se ha mostrado "orgulloso" de poder formar parte de él como Diputación.

Recuperar la historia

Para la delegada del Gobierno regional en Cuenca, María Ángeles García, este miércoles ha sido un día de "tremenda emoción", ya que ha asegurado ha sido "muy arduo" el trabajo para llevar a cabo la rehabilitación de la Casa del Corregidor.

Antes de comenzar la última parte de la rehabilitación en 2019 "no se podía ni pasar al edificio de la cantidad de escombro que había, daba angustia, y ahora podemos disfrutar de un espacio inigualable".

Por eso, ha apostado por seguir utilizando el Consorcio de la ciudad como "palanca de impulso" para la rehabilitación de edificios del Casco Antiguo, y que así se trabaje en nuevos proyectos que pongan en valor el patrimonio conquense y la recuperación de la historia de la ciudad.

Por último, García ha apostado por "sacar lo mejor del edificio" tanto de forma cultural como turística e incorporar el patrimonio que ha emergido de entre sus muros para incorporarlo a los centros educativos de la ciudad.

Un gran resultado

Para el subsecretario de Estado de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Jesús Manuel Gómez, la rehabilitación a la que ha sido sometida la Casa del Corregidor "ha cubierto ampliamente las expectativas" que tenían en el Ministerio.

Gómez ha recordado cómo desde 2008 el ministerio ha ido aportando fondos del 1,5% cultural para llevar a cabo esta rehabilitación, un proyecto "que siempre ha encajado dentro del proyecto del ministerio de conservación del patrimonio".

Ahora, con la obra ya acabada, el resultado va a permitir "disfrutar y recuperar una parte de la ciudad que había permanecido oculta, abriendo la casa del corregidor a la ciudad", una obra que ha sido "un hito del consorcio" del que hoy "todas las administraciones deben felicitarse" tras 473 años desde que se construyera el edificio y 12 anualidades desde que comenzaran las tareas de rehabilitación.

Muchas posibilidades

Por último, ha tomado la palabra el alcalde de la ciudad y presidente del Consorcio, Darío Dolz, quien no ha dudado en felicitar todos los gerentes del Consorcio, arquitectos, técnicos y arqueólogos que han participado en la rehabilitación de la casa del Corregidor.

En primer lugar, ha destacado que este edificio fue declarado Bien de Interés Cultural en el año 2002 como muestra de la "singularidad" de la arquitectura conquense con esos rascacielos inversos, "que se han ido construyendo con poca altura en la calle, pero con hasta 8 plantas que dan a la hoz del Huécar".

Después, ha avanzado la "multitud" de posibilidades que presenta ahora el edificio ya rehabilitado, y es que desde la planta 0 entrando por la calle Alfonso VIII se va a dedicar a albergar la oficina municipal de turismo. Las dos plantas superiores van a ser la sede ya definitiva del Consorcio de la Ciudad de Cuenca, dedicando las 5 plantas inferiores a un museo carcelario, archivo municipal con los ejemplares más importantes del mismo y espacios expositivos tanto de la arquitectura de la ciudad como otras.

Hasta que se reforme la antigua iglesia de San Gil, este espacio también va a albergar la sede de la Asociación de Vecinos del Casco Antiguo y, en conjunto, que el edificio sirva "como un elemento adicional y dinamizador del Casco Antiguo".

"Es el segundo edificio más importante de la ciudad tras el Ayuntamiento, y por eso hay que sacarle todo el jugo para que se pueda beneficiar la ciudad, el turismo y que sea un emblema para poder enseñar y exponer a todo el mundo", ha concluido Dolz.